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Somos personas que colectivamente trabajamos

en la ciudad y sus barrios por un modelo energético renovable y respetuoso con el planeta, que

creemos en un modelo económico en donde el reparto equitativo sea la base, que aspiramos a

que Iruñea sea una ciudad con un sistema de movilidad sostenible y que luchamos porque la

cultura y la educación sean el pilar de nuestra sociedad. También creemos que, en este nuevo

modelo de ciudad, barrios y sociedad, el comercio local y de barrio juega un papel muy importante

en el desarrollo de una sociedad diferente a la impuesta por el sistema neoliberal.

En estas fechas en las que la publicidad, los medios y la pretendida normalidad nos incitan

constantemente a un consumo desmedido, creemos que es necesario reflexionar, aunque sea un

momento. Este consumo no suele responder a las necesidades de la persona consumidora y son,

más bien, la obligación impuesta por una sociedad necesitada de consumir para tratar de esconder

sus propias miserias. Pero somos personas partícipes de esa realidad actual, que no podemos

escondernos en estas fechas. Por eso, si de alguna u otra manera celebramos estas fechas

consumiendo más de lo habitual, pensamos que es importante fomentar, en todo caso, un

consumo responsable y que sirva como una aportación al nuevo modelo social y de ciudad. Si

vamos a consumir, en estas fechas y en cualquier otra, vamos a hacerlo en los pequeños

comercios, en el comercio local y de barrio, no en las zonas comerciales pensadas y diseñadas por

las grandes marcas. 

Comprar en el comercio de casa, de barrio, significa aportar tres veces más en la economía de la

ciudad que si lo hacemos en un gran supermercado. De hecho, en la crisis socio-económica que

vivimos, este tipo de comercio es imprescindible para otro tipo de sociedad donde las relaciones

interpersonales son la base para crear un mundo más solidario. 

Comprar en una tienda de barrio significa cercanía que se traduce en profesionalidad, en un

consumo sin presión y en sinceridad. Además hace innecesario el coche para ir a la tienda. Por el

barrio no necesitamos utilizar nuestro vehículo privado y para ir de un barrio a otro podemos

utilizar el transporte público. Ir en bici o paseando es una forma de comprar más sosegada y

tranquila. 

Consumir en este tipo de comercios da vida a nuestros barrios, con actividad y relaciones a pie de

calle. Es una forma de apoyar a nuestras vecinas y vecinos emprendedores y fomentan la

convivencia entre nosotras y nosotros. Significa calidad, porque comprar en el pequeño comercio

es sinónimo de producto local, cercano y con garantía. Genera el 50% de empleo en el sector y

activa la economía local desde los propios barrios. 

Tenemos muchas razones para consumir en el pequeño comercio, en nuestros mercados y en las

tiendas del barrio. Son nuestras vecinas y vecinos, son parte de ese modelo social y de ciudad que

estamos trabajando y son una aportación vital para la nueva ciudad basada en el equilibrio, la

solidaridad y la convivencia. Consumiendo con responsabilidad en el pequeño comercio, hacemos

grandes nuestros barrios y hacemos grande Iruñea.