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El concierto de Anestesia que el pasado sábado tenía previsto celebrarse en el Gaztetxe de Arrotxapea finalmente tuvo que trasladarse al Gaztetxe de Burlata. Según han indicado desde el Gaztetxe de Arrotxapea, el concierto había sido “prohibido por el Ayuntamiento de Iruñea”, y durante todo el fin de semana la Policía Municipal estuvo “tratando de pararnos”. “Desde el viernes por la mañana estuvieron tratando de lograr los números de los grupos de música” y el sábado por la mañana “identificaron a los técnicos de sonido y a varios jóvenes diciéndoles que les acusarían de un delito de desobediencia y que les requisarían el material de trabajo”.

Además, los jóvenes se quejan que una vez celebrado el concierto en el Gaztetxe de Burlata, el domingo por la mañana, varias dotaciones de Policía Municipal abordaron la furgoneta que llevaba al Gaztetxe de Arrotxapea el material del concierto “y de un modo chulesco y violento” identificaron a varias personas y entraron en el Gaztetxe “sin autorización judicial”. “Comenzaron a sacar fotos y cuando tratamos de impedírselo todavía se pusieron más chulos y nos quitaron de en medio violentamente”. Por todo ello, desde el Gaztetxe de Arrotxapea cargan contra la edil de Geroa Bai Itziar Gomez, a la que piden que “ate a sus perros”.

Informes técnicos, prohibiciones y oferta alternativa
El motivo de este nuevo conflicto entre los jóvenes del Gaztetxe de Arrotxapea y el Ayuntamiento de Iruñea viene por la prohibición de hacer actividades públicas en este espacio autogestionado. Tras su ocupación en el 2016, en el centro social se han celebrado numerosas actividades y algunos conciertos multitudinarios que provocaron las denuncias de algunos vecinos por las molestias generadas, lo cual llevó incluso a los jóvenes del Gaztetxe a replantearse continuar celebrando conciertos. Por su parte, el Ayuntamiento de Iruñea realizó una inspección del local derivada de las denuncias vecinales y determinó prohibir la celebración de actos de este tipo en su interior al entender que el lugar no reúne las condiciones necesarias para realizar eventos multitudinarios. Desde esta decisión, han sido varias las ocasiones en las que los jóvenes han denunciado que se han prohibido distintos actos y algunos de ellos han tenido que ser suspendidos.

Según ha podido saber Ahotsa.info, antes de este fin de semana hubo contactos entre el Gaztetxe y EH Bildu para que el concierto se pudiera celebrar en otro espacio. De hecho, se ofreció como alternativa un frontón cubierto de una localidad cercana, pero los jóvenes del Gaztetxe no aceptaron la oferta y finalmente, gracias a la solidaridad del Gaztetxe de Burlata, el concierto se pudo celebrar.