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Queremos manifestar nuestro descontento, con la decisión de poner en los terrenos de la huerta en la Txantrea unas viviendas colaborativas senior.

Nos parece muy triste y no llegamos a comprender que quiten un proyecto que ya está funcionando para poner otro que no sabemos cómo resultará.

Una huerta en la que participan asociaciones como Tasubinsa, Clinica Padre Menni, Siñarzubi, Berriztu, Institutos del barrio, Mayores Auzotegui, Unidad de Barrio…aportando sus saberes y disfrutando de ver cómo se planta, riega y crece aquello que luego comeremos.

Este es un proyecto comunitario que surge del barrio y cuenta con el apoyo de las vecinas y vecinos. Nos gusta ver que el huerto forma parte de su paseo, que entran a comentar sus impresiones y que es un espacio de encuentro para muchas personas mayores, de ellas hemos aprendido mucho sobre horticultura, es un espacio que nos gustaría mantener para seguir fomentando el intercambio de saberes.

Así como en otros barrios de Pamplona, aquí ya llevamos 5 años dando vida a la huerta y al barrio, aquí nos relacionamos diferentes Asociaciones, estamos personas de diferentes edades y capacidades y eso es muy enriquecedor, cada vez se observan más beneficios en el contacto con la naturaleza, en mantener los espacios verdes, en las relaciones, es algo que estamos viviendo y sin dudarlo decimos que es así, este es un gran proyecto que ya está dando resultados y no sólo hablamos de tomates y lechugas, lo importante son las personas.

No nos parece adecuado modificar ese entorno y además no queremos que para construir unas viviendas se tale el chopo que preside la huerta.

Somos conscientes de que las viviendas senior son un proyecto interesante, no estamos en absoluto en contra, pero sí pedimos que haya sentido común y se pongan en otro sitio.

Nos consta que el Gobierno de Navarra y otros Ayuntamientos cercanos han ofrecido parcelas para la construcción. Las-os componentes de las Cooperativas de viviendas, son personas de espíritu critico y participativo, con lo que apelamos a revisar su criterio para que busquen otro emplazamiento y que no se rompa el ecosistema actual y pueda seguir funcionando la huerta que tanto esfuerzo y dinero ha costado.

Pedimos que el Gobierno de Navarra reflexione y priorice la cesión que tenía hecha al Ayuntamiento de Pamplona para mantener el huerto. Sabemos que Krispilak no es la propietaria de la tierra, nuestra labor es trabajarla, animar a que venqan las personas a ella, seguir defendiéndola como parte del barrio y… disfrutarla!, preferimos lo verde a poner más cemento.