Un estudio revela que la cantera de Zilbeti no es necesaria para el futuro de Magnesitas

La planta de Magnesitas de Zubiri todavía tiene suficiente mineral para más de 30 años, por lo que la cantera de Zilbeti no sería necesaria.

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El Gobierno de Navarra ha otorgado una Declaración de Impacto Ambiental (DIA) favorable, como paso previo a la concesión de la Licencia Municipal por parte del Ayuntamiento de Esteribar, a la ampliación de la cantera de Azkarate, situado fuera de la Red Natura y en la que la empresa Magnesitas Navarras ha encontrado suficiente mineral de buena calidad como para abastecer a su factoría de Zubiri durante 33 años y medio.

Esta información echa por tierra el principal argumento de Magnesitas y el Gobierno de Navarra para realizar el proyecto de la cantera de Zilbeti, muy cuestionado por grupos ecologistas y vecindario. Y es que según esta empresa y el gobierno de UPN, la cantera de Zilbeti era necesaria e imprescindible para la continuidad de la actividad minera y para evitar el hundimiento económico de la zona, que en gran parte depende de esta industria.

"Quede claro que el Gobierno de Navarra ha considerado suficiente el Estudio de Impacto Ambiental presentado para la ampliación de la mina de Azkarate en Eugui, pero nunca ha valorado a este proyecto como un complemento al de Zilbeti, tal y como interesadamente ha filtrado la empresa minera a los medios de comunicación", añaden desde

SEO/BirdLife y la Coordinadora Monte Alduide, grupos de oposición al proyecto de la cantera en Zilbeti.

La existencia de mineral de magnesita, tanto en la variedad cristalizada como la de dolomías, fuera de los espacios europeos protegidos de la Red Natura, hace "innecesaria" la apertura de la mina en Zilbeti, actualmente recurrida por las organizaciones conservacionistas SEO/BirdLife y Coordinadora Monte Alduide ante la sala de lo contenciosos del TSJN, al considerar que incumple la legislación vigente y las Directivas europeas.

A juicio de estas dos organizaciones, debe resaltarse "la gravedad" de las consecuencias producidas "por la ocultación" por parte de la empresa MAGNA, de la alternativa que ahora se presenta y que según ellas "era sobradamente conocida por la empresa minera". Esta falta de información al propio Gobierno de Navarra se ha hecho "a sabiendas de que su conocimiento hubiera provocado la anulación del proyecto de Zilbeti".

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