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Riace, un pequeño pueblo situado en la costa calabresa italiana, era hasta hace unos años en proceso de despoblación y abandono en el que sólo vivían ya personas mayores.

Hace unos años, el pueblo con su alcalde Domenico Lucano a la cabeza y la complicidad de sus habitantes, se convirtió en un enclave de acogida. “Riace lleva años acogiendo personas que llegan a sus costas huyendo de sus pueblos por diferentes causas. Domenico y los vecinos y vecinas de Riace, han cambiado la realidad del pueblo. Hoy, gracias al asentamiento de las nuevas vecinas y vecinos, el pueblo cuenta con bares, comercio, escuela, y servicios”, indican desde Iruñea Ciudad de Acogida, que ha sido quien ha convocado la concentración solidaria de hoy.

Domenico en su apuesta por la acogida “se ha enfrentado al sistema, a la mafia calabresa, y ahora tiene un problema con el gobierno neofascista, imperialista y xenófobo italiano y con su ministro de interior Matteo Salvini, siniestro personaje además de cortar todas las ayudas, impide a Domenico residir en Riace, su pueblo, y pretende desmantelar un proyecto que hasta hoy ha funcionado sin problemas. Se quiere evitar lo que para la Europa fortaleza sería un “mal ejemplo”, denuncian.

Italia se está movilizando para dar respuesta “a este atropello”, por lo que Iruñea Ciudad de Acogida y los movimientos que participan en la Caravana Abriendo Fronteras, mediante esta concentración y un escrito que presentarán la próxima semana en el Consulado de Italia, quieren manifestar su protesta contra el comportamiento del Gobierno y de la judicatura italiana y en defensa de los derechos de Domenico, de Riace y del resto de pueblos italianos que están desarrollando proyectos de acogida.