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En Tafallaldea, donde al menos 31 personas han sufrido la tortura, la  presentación de la asociación Torturatuen Sarea congregó a decenas de  personas que abarrotaron el espacio de la Casa de Cultura.

Llama la atención que en esta zona, menos 2 casos, el resto son personas torturadas a partir de 1980 hasta 2007. vecinos y vecinas de 9 localidades: Leoz, Barasoain, Puiu, Tafalla, Unx, Erriberri, Beire, Larraga y Faltzes.

Y han sido supervivientes de la tortura de la Zona Media quienes se han encargado de realizar el censo, que va creciendo conforme se entrevistan con personas de diferentes edades, constatando “que cuesta un montón hablar de este tema”, tal y como indicó una de ellas durante la prresentación de la asociación.

“Ni con las personas de más confianza, ni con los mejores amigos. Este tema lo aparcamos, rehusamos a hablar de él. Nuestras mentes tienden a autoprotegerse en el silencio y a guardar todo en nuestro interior. Es muy respetable la postura de no dar el paso de unirse a la Red de torturados porque sabemos del miedo inoculado en las mazmorras del Estado, miedo que dura en muchos casos de por vida”, dijo en su alocución.

Sin embargo, reconoció que el hecho de que esta Red “vaya cogiendo potencial en prensa y en instituciones nos ha animado a muchos a dar este pequeño paso”, remarcando lo duro que resulta “salir a la palestra, que afloren nombres, apellidos, caras, y pedir que se reconozca institucionalmente que fuimos torturados, que se den todos los pasos y se impulse prevenir y evitar esta lacra miserable, y que haya compromisos serios de no repetición.”

Además de querer que con la presentación de la Red se recuerde lo ocurrido, el objetivo era también acercar a las generaciones más jóveneslo ocurrido para que sepan “de primera mano lo que nos supuso, algo que marco nuestras vidas y las de nuestro entorno”.

Para tratar de acercar más lo que durante décadas se vivió en Euskal Herria, desde el escenario se recordó que casi toda la clase política “miraba para otro lado, cuando no apoyaba directamente la tortura, qué no decir de los medios de comunicación”, y que ello hacía todavía más dura la tortura.

“Cuando por ejemplo te detenían, eras un peligroso terrorista, cuando a los pocos días salias libre, toda la prensa callaba, ya no eras tan peligroso, pero jamás se desdecian”, recordaba esta víctima de la tortura. “Y los jueces y fiscales. Terrible. Esta gente nos ha visto pasar en condiciones lamentables, muchos sin poder casi ni hablar, hechos un cristo, amoratados, vejadas sexualmente…” Aun así, no tomaban medidas ni investigaban los hechos. “Nada, son parte del engranaje que ha hecho posible que esta práctica haya perdurado en el tiempo en la más absoluta impunidad”, se denunció.

Llamamiento a participar en el censo y en la Red
Convencidos de que hay más personas que fueron torturadas y que todavían no han dado el paso de integrarse en la Red o que ni siquiera figuran en el censo, desde el escenario se lanzó un llamamiento para “armarse de valor” y ponerse en contacto con Torturatuen Sarea. “Hay unos formularios que la Red de torturados de Navarra reparte entre los torturados interesados. Se hace bastante duro rellenarlos, pero es un método válido para que el Instituto Vasco de Criminología presente informes completos a las instituciones”, dijeron, subrayando el aspecto liberador de cumplimentarlo. Porque como quisieron dejar claro “ni nos han quitado las ganas de luchar, ni las ganas de vivir, y el hecho de estar aquí denunciando las torturas es de por sí su derrota, su fracaso, nuestra fuerza.”

Más presentaciones y mociones
Además de en Tafalla, la Red se ha presentado en otras zonas del herrialde y pronto visitará Lesaka, Atarrabia, Berriozar, Leitza y Sakana. También se están presentando mociones en los ayuntamientos de las localidades donde ha habido casos de tortura, en total 101 pueblos de Nafarroa.