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El Presidente del Parlamento foral, Unai Hualde, ha mantenido hoy en la sede de la Cámara una reunión con una representación de la Red de Personas Torturadas de Nafarroa.

El objeto de la reunión, según han explicado Jorge Txokarro y Mariló Gorostiaga, ha sido dar continuidad a la dinámica de colaboración entablada con las instituciones navarras para “situar a las víctimas de la tortura en el ámbito de reconocimiento y reparación que, sin distingos, corresponde a los afectados por cualquier práctica que suponga violación de los derechos humanos”.

A ese respecto, han indicado que, “si bien las instituciones no son el único sujeto al que nos dirigimos, pues trabajamos también con los agentes sociales, es importante compartir nuestra situación con los representantes públicos, al objeto de tratar de dar visibilidad a una realidad sometida al olvido durante cinco décadas. La tortura, que ha gozado de total impunidad, es un problema social y como tal deseamos dar a conocer nuestra realidad, también en el marco del Plan Estratégico de Convivencia y de la Ley Foral de reconocimiento y reparación de las víctimas de abusos policiales y de grupos de extrema derecha”.

Unai Hualde, por su parte, ha subrayado que el compromiso parlamentario con la investigación de la tortura en el herrialde se mantiene vigente desde la aprobación de una resolución en 2016.

Del mismo modo, Hualde ha expresado su confianza en que los grupos parlamentarios puedan llegar en las próximas semanas a un acuerdo para la designación de los 4 miembros de la Comisión de Reconocimiento y Reparación de Víctimas por actos de motivación política provocados por grupos de extrema derecha o funcionarios públicos, que corresponde nombrar al Parlamento en virtud de la Ley Foral 16/2019.

“Con ello y una vez conformada esta Comisión entraríamos en una fase de análisis que pueda llevar, por fin, a reconocer y reparar a víctimas de la tortura en Navarra, hasta ahora olvidadas por las instancias oficiales”, ha significado Hualde.

La Red de Personas Torturadas tiene como “objetivo reivindicar una investigación oficial, profesional e independiente dirigida a esclarecer el número de víctimas que han padecido tortura en las últimas décadas en Nafarroa”, y viene desarrollando una discreta dinámica de contactos con agentes políticos, institucionales y sociales en aras de lograr este fin.