Sare pide pasos y compromisos para liberar a los presos enfermos en la marcha para denunciar la muerte de Oier Gomez
Cientos de personas han respondido en una fría tarde invernal a la convocatoria realizada por Sare Herritarra para denunciar la muerte de Oier Gomez y exigir que la suya "sea la última" y que se libere a los y las presas políticas vascas gravemente enfermas. Un juzgado a prohibido el acto de recuerdo organizado para mañana en Gasteiz por sus familiares y amigos.
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Cientos de personas han partido a las 17:00 horas del sábado desde el Centro Cívico Iparralde de Gasteiz en la manifestación convocada por Sare Herritarra. Tras la pancarta en la que se se leía ‘Oier azkena izan dadila. Presxs gravemente enfermxs a casa’, representantes de la sociedad civil (entre los que se encontraban ex presos políticos enfermos) han querido recordar a Oier Gomez y poner sobre la mesa la necesidad de que todas las personas presas gravemente enfermas sean puestas en libertad.
“Caminamos juntas, para exigir a los Gobiernos, la libertad inmediata de los presos y presas gravemente enfermos, siguiendo la reivindicación que estos últimos años que Oier hizo suya”, han afirmado las convocantes. En la manifestación, gritos de “Espetxeak hiltzaileak”, “Euskal presoak etxera” o “Oier gogoan zaitugu”.
Durante el recorrido se han podido ver diferentes gestos de solidaridad, entre los que ha destacado el despliegue de una pancarta desde el Hospital Santiago con la frase ‘Oier azkena izan dadila’.
En el acto final, Sare ha recordado que hace año y medio, miles de personas hicieron este mismo recorrido, para exigir la puesta en libertad de Oier Gomez. “Lo conseguimos, pero ya era demasiado tarde para hacer frente, en condiciones normales, a la enfermedad que padecía“.
Una lectura final en la que han exigido a los Gobiernos, que a la pena impuesta por los tribunales de justicia, “no se les puede añadir la pena de la inhumanidad que supone privarles de su derecho a la salud y a la vida”, haciendo también un llamamiento a las Instituciones, a los partidos y a todos aquellos que tengan algo que ver en la exigencia de “una solución justa a tantos años de confrontación y enfrentamiento”.
También han tenido un recuerdo para los 21 presos políticos gravemente enfermos, que se encuentran en una situación similar a la de Oier: “Deberían estar en libertad, porque tanto el Código Penal como el Reglamento Penitenciario, así lo recogen”. Y, muy especialmente, han mencionado los casos de Txus Martin, Aitzol Gogorza o Ibon Fernandez Iradi, que en pocas semanas afrontaran “momentos difíciles”.
Por último, un mensaje a los Estados francés y español: “El cumplimiento de la legislación penitenciaria, no puede entenderse como una claudicación del estado. Es cumplir la legislación interna y europea”.
“Oier nunca se rindió”
La segunda manifestación del día, convocada por el Movimiento por la Amnistía y Contra la Represión, ha partido a las 19:30 horas desde la Plaza de la Virgen Blanca con la foto de Oier y una ikurrina con un crespón negro presidiendo la convocatoria y desafiando al mal tiempo al igual que la primera. En ella, además de recordar a Oier Gomez también han tenido un recuerdo para los otros 21 compañeros enfermos ya mencionados.
Al final de la movilización han denunciado que “históricamente los Estados español y francés han utilizado la salud para condicionar la lucha por la libertad y a día de hoy siguen igual“. Además, han remarcado que la libertad de estas personas no se basa en motivos médicos sino en razones políticas ya que les dan, según el Movimiento, dos opciones: “Arrepiénte y facilitarás tu salida. Arrepiénte o morirás”.
En el recuerdo, un nombre: Oier Gomez. “Oier nunca se rindió. A pesar de los chantajes, se mantuvo digno en sus convicciones y se ha ido con la cabeza alta, orgulloso de su militancia política“. Es por ello por lo que han querido remarcar que Oier ha fallecido como un represaliado político y no en libertad: “Tanto el Estado francés como el español y el portugués lo vigilaban de cerca por si mejoraba, para volver a encerrarlo”.
Aunar fuerzas por una amnistía total. Ese es otro de los mensajes que han querido remarcar. “Por muy difícil que parezca el objetivo, por muchas trabas que haya en el camino, si no luchamos por ello es imposible conseguirlo. Es hora de organizarse y reivindicar la libertad de aquellos que decidieron darlo todo por la libertad colectiva”.
Así mismo, consideran que “no puede haber medias tintas en la resolución de las consecuencias de un conflicto político. O se solucionan las razones por las que esos militantes políticos se unieron a la lucha o el conflicto será eterno, la lucha seguirá y las consecuencias también”.