Manifestación este sábado en Erriberri por una sanidad rural digna

La reducción de los servicios sanitarios en los centros de salud y consultorios de Erriberri, Beire y Pitillas y la dejación por parte del Gobierno foral que no atiende a las demandas de la población de la zona ha llevado a la Plataforma por una sanidad rural digna a convocar una manifestación este sábado en Olite a las 12.00 del mediodía. Afirman que la vertebración territorial de Nafarroa "es una entelequia si no se garantizan los servicios públicos fundamentales al conjunto de la población".

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El 1 de febrero de 2020, hace casi año y medio, nos juntamos en esta misma plaza en Olite con este mismo objetivo, defender una sanidad rural digna. La preocupación e inquietud de ver el deterioro de la misma nos trajo aquí. Los recortes horarios en Beire-Pitillas, reduciendo el horario de atención entre los dos pueblos a la mitad, incluso quitando dicha atención 2 días a la semana en Beire, la no cobertura de determinadas vacantes que se producían de Atención primaria y de pediatría, la eliminación de las urgencias nocturnas en Olite, el deficiente funcionamiento de la atención telefónica para coger citas, la poca estabilidad y alta rotación del personal médico que no favorece que se conozca al paciente eran problemas que repercutían negativamente en el servicio que recibíamos.

A menos de un mes después de aquella manifestación se desató el estado de alarma a consecuencia de la covid-19. Evidentemente tuvimos que dejar cualquier tipo de protesta y movilización y amoldarnos a aquella nueva realidad. Aún con todo en octubre del 2020 acudimos al Parlamento de Navarra a plantear nuestras reivindicaciones e inquietudes, comparecencia que no sirvió de mucho, aun estamos esperando la llamada del Gobierno de Navarra. Ante la situación generada por la vacuna y la mejora de los datos de la evolución de la pandemia retomamos las movilizaciones. Desde el 8 de mayo, todos los sábados, en nuestros consultorios en Beire Pitillas y en Olite los miércoles, nos hemos venido concentrando en los consultorios.

Hemos decidido volver a la carga. Ser menos no resta derechos y la atención primaria en nuestros centros de salud es un derecho fundamental que nos preocupa. A los problemas de funcionamiento que ya denunciamos antes de la pandemia, que persisten, hay que añadir otros, que no vamos a permitir que se consoliden en el tiempo , porque son problemas que han surgido nuevos o viejos que se han agudizado. No vamos a permitir el cribado por parte del personal administrativo, la generalización de las consultas y tratamientos telefónicos, no vamos a permitir el deficiente funcionamiento del servicio de citas telefónicas, el aplazamiento de controles de patologías crónicas, no vamos a permitir el bloqueo del sistema de reclamaciones vía Internet, no vamos a permitir que se consolide el recorte horario en Beire-Pitillas, ni que haya un pueblo sin medico todos los días de la semana, no vamos a permitir que estén meses sin cubrir las vacantes de pediatría, ni que se consolide la eliminación de las urgencias nocturnas en Olite. Y por último será la administración la que determine las medidas a tomar para que los profesionales de la medicina vean el trabajar en el mundo rural una oportunidad y no un inconveniente o problema.

Creemos que solo a través del diálogo con la administración es posible abordar la reversión de todos estos problemas, es por ello exigimos diálogo y si este no se produce satisfactoriamente, una vez pasado el verano, retomaremos las movilizaciones, con la intención de llevar nuestra protesta a Pamplona. Buscaremos el apoyo de otras zonas rurales de Navarra con las mismas problemáticas, además de la complicidad de la población en general, que entienda que la degradación de los servicios públicos en la atención primaria rural es un síntoma que socava la cohesión territorial de nuestra tierra. La vertebración territorial es una entelequia si no se garantizan los servicios públicos fundamentales al conjunto de la población Navarra, independientemente del número de habitantes de su municipio. Con el fantasma de la despoblación acechando a muchos de nuestros pueblos entendemos que unos servicios públicos de calidad en sanidad y educación son el cimiento indispensable para que se mantengan y desarrollen el resto de servicios y se garantice nuestra supervivencia.

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