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La alternativa de conexión del «corredor navarro» del TAV con la «Y vasca» «más favorable y ventajosa» es la de Gasteiz, según el estudio informativo que el ministro español de Fomento, Iñigo de la Serna, presentó ayer en Iruñea en medio de protestas y críticas. Se ha confirmado de este modo que la solución de Gasteiz tiene menos inconvenientes que la unión a través de Ezkio, por su menor coste económico y menor complejidad técnica.

Pero, evidentemente costará bastante más de lo previsto, por ejemplo, el trayecto Iruñea-Donostia (mas de una hora) y el Iruñea-Bilbo (casi una hora).

Mientras desde el Gobierno navarro mostraban satisfacción por la construcción del TAV pese a que no se acaba de aclarar si transportará viajeros y mercancías, desde el Gobierno español se dejaba claro que continuará por su línea unilateral licitando tramos directamente en Nafarroa «como en el resto de comunidades autónomas», sin aclarar si van a suscribir un nuevo convenio sobre el TAV con Nafarroa.

Mientras todo esto ocurría dentro de la Delegación del Gobierno español, un centenar de personas convocadas por la Iniciativa por el tren, entre ellas miembros de tres de los cuatro partidos que apoyan al Gobierno de Nafarroa (EH Bildu, Podemos e I-E) y ediles de Aranzadi, protestaban contra el proyecto y la «imposición» del TAV.

Tras una pancarta con el lema ‘No a la imposición del TAV, Nafarroak erabaki’, los manifestantes -entre quienes también había representantes de los sindicatos ELA, LAB y STEILAS- corearon lemas en contra del proyecto y sostenían carteles con lemas como ‘El dinero del TAV para gasto social’ o ‘155 ni en Cataluña ni en Iruñea’.

En declaraciones a los periodistas, Martin Zelaia explicó que el ministro traía “una imposición de un tren que Navarra no necesita», que «va a transportar solo pasajeros y que tendrá “graves efectos medioambientales”. Desde la Iniciativa por el tren volvieron a insistir en la necesidad de un tren público y social basado en las actuales infraestructuras.