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Los arrantzales barbudos que han sido condenados a cinco meses de cárcel por desplegar una ikurriña de grandes dimensiones en el txupinazo de Sanfermines de 2013 han denunciado que esta sentencia es de carácter político y que les da la razón a lo que expresaron en el juicio, «que tenemos leyes –la Ley de Símbolos en este caso– que excluyen y castigan a sectores amplios de la población por su sentir, pensar y actuar», según han destacado esta tarde en una comparecencia en Iruñea Josu Gracia –que fue absuelto– y Mikel Valdividielso en nombre de sus otros tres compañeros, Iñigo Ramallo, Natxo Barriuso e Iker García. Ambos han confirmado que se ha recurrido la sentencia.

«Vivimos una vulneración grave y constante de las libertades democráticas. En el camino a la consecución de sus objetivos políticos, la derecha más rancia y trasnochada intenta una y otra vez anular las libertades democráticas de la ciudadanía, evitando así que nos situemos como agentes políticos activos», han destacado.

Asimismo, se han dirigido a «los responsables de la sentencia, es decir, a jueces, UPN y PSN» para advertirles de que «esa estrategia está caduca y no va a poder parar la construcción de un modelo basado en las necesidades de la ciudadanía».