ahötsa_

A principios de junio, llegó a la junta la noticia de que la parroquia pretende cerrar las puertas de la sociedad al Concejo para celebrar reuniones y guardar los archivos del mismo, alegando que en el contrato de alquiler no figuraba en qué condiciones jurídicas estaba y porque piensan que el Concejo mantenía “reuniones políticas”.

Por su parte el Concejo, manifestó que lo de las reuniones políticas es totalmente falso, que siempre se han ceñido exclusivamente a temas relacionados con la mejora del pueblo y sus vecinos. Añaden también que “les extraña que durante 40 años, el concejo se ha venido reuniendo en dicha sociedad sin ningún problema y piensan que la postura de la parroquia se debe a que la actual junta la forman personas con diferente pensamiento al suyo”.

Sobre la “propiedad moral” del edificio cuestionan que pertenezca a la parroquia por cuanto está construido en terreno comunal y porque la ejecución de la obra se llevó a cabo por los propios vecinos. Alegan que “la parroquia solo puso el dinero de los materiales y mucha prisa para registrarlo a su nombre”.

Ante esta situación el Concejo ha indicado que solo desea que se le permita la utilización del local como estos últimos años para poder seguir trabajando en la mejora de la calidad de vida de sus vecinos.

La respuesta del Arzobispado ha sido que “el Concejo ha accedido a una propiedad ajena realizando un uso que, hasta la fecha, no ha sido consentido”. Por ello exigen al Concejo que “primero, solicite autorización de uso del Centro Parroquial y segundo, explique qué tipo de uso va a hacer del mismo así como posibles horarios”. Una vez hecho esto, aclaran, la Parroquia valorará la conveniencia y viabilidad de autorización de uso.

El Concejo se ha mostrado indignado antes estas declaraciones de la Iglesia y niega rotundamente que desconocieran el uso que hacían de la sociedad y que sea la parroquia la legítima propietaria. Finalmente indican que “haremos todo lo que esté en nuestra mano para seguir manteniendo nuestra espacio para reunirnos y mantener las archivos”.

Premio a la Plataforma de Defensa del Patrimonio Navarro en Catalunya

La Plataforma de Defensa del Patrimonio Navarro ha recibido este fin de semana el premio Josep Mora i Castellá por su trabajo en la defensa del patrimonio artístico e histórico y en especial por la denuncia de las inmatriculaciones realizadas por la Iglesia en Nafarroa y en el Estado.