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Para este próximo sábado 15 de octubre, la red ciudadana Sare ha convocado una manifestación para denunciar la situación de las personas presas gravemente enfermas y exigir su excarcelación. En esta situación, sufriendo enfermedades graves e incurables, se encuentran 10 personas que tal y como denuncia Etxerat “están viendo vulnerado su derecho a la salud, para cumplir la finalidad de la actual política penitenciaria: servir de instrumento de chantaje, servir de instrumento de venganza y agudizar el sufrimiento de una parte de esta sociedad que aún no conoce tregua ni distensión alguna”.

Etxerat remarca el grave estado de salud de Ibon Iparragirre, que ha empeorado al haber sufrido una acusada bajada de defensas. Así se desprende de la última analítica que le han realizado y que registra unos valores que suponen un factor de riesgo. Iparragirre tiene SIDA en fase C, el estado más avanzado de esta enfermedad. “La cárcel pone buen cuidado además, en que Ibon no esté cerca de sus compañeros, de aislarle, de acentuar su sufrimiento. Y siguen negándole la excarcelación contemplada en la legalidad para casos de enfermedades graves e incurables como el suyo. Le niegan el acceso al tratamiento, a la atención y al seguimiento médico que una situación de encarcelamiento nunca le podrá garantizar. Le niegan el acceso a la salud”, denuncia Etxerat.

Etxerat observa que las posibilidades de estabilizarse, de evitar que la enfermedad avance, desaparecen “en manos de una maquinaria cuya característica principal es la de la crueldad”, y ponen el acento en “la irresponsabilidad de las fuerzas políticas que aplauden o consienten el inmovilismo, el ensañamiento, el sufrimiento añadido”.

La asociación de familiares y amigos de los y las represaliadas vascas llama a acudir a la manifestación convocada por Sare para este próximo sábado para “no prestar apoyo a la crueldad”. La marcha saldrá a las 17:00 desde el Bulevard donostiarra.