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De un tiempo a esta parte se vienen sucediendo una serie de atropellos en el paso de cebra situado en el vial que va desde la rotonda de Sarriguren hacia el polígono Areta. Al ser el único acceso existente desde esa zona para todas las personas que van andando o en bicicleta a los centros de trabajo de la Ciudad de la Innovación, se ha convertido por méritos propios en un “punto negro” para la seguridad vial, denuncian los comites de empresas de la zona. De hecho, el Plan de Movilidad de la Ciudad de la Innovación 2010-2018 ya reconocía que, entre otras carencias, el acceso hasta la Ciudad de la Innovación no contaba con infraestructuras adecuadas para el transporte no motorizado. “Los ciclistas y peatones se desplazan en situaciones de riesgo para su seguridad, compartiendo el espacio con el tráfico”, se indicaba en dicho estudio.

Desde entonces el problema lejos de solucionarse “se ha agravado”, indican, ya que tanto la afluencia de vehículos como el número personas que usan el paso de cebra se ha incrementado notoriamente.

Las empresas, continuando dicho Plan de Movilidad, han propuesto varias actuaciones a Gobierno, Mancomunidad y Ayuntamientos. Presentadas en el registro del Gobierno de Navarra en enero del 2012, expuestas y debatidas, se han visto continuamente postergadas. Entre todas ellas destaca y resuelve el problema del comentado paso de cebra, la instalación de una pasarela para peatones y bicicletas entre Erripagaña y la Ciudad de la Innovación, que por otra parte ya cuenta hasta con el proyecto realizado por el propio Gobierno. Hasta ahora tan sólo se han puesto en marcha una serie de pequeñas medidas (señalización vertical, señales luminosas, pivotes) orientadas a minimizar el riesgo, que no parecen haber sido eficaces para reducir el número de siniestros.

Los comités de empresa de la Ciudad de la Innovación exigen a todos los agentes implicados (empresas, instituciones y organismos públicos) “que actúen” y solucionen el problema. “No es cuestión de un gran presupuesto, sino de un poco de interés por resolver un problema grave, potencialmente muy grave. No queremos muertos. No queremos ningún accidente”.

El viernes 23 de junio a las 8.30 de la mañana en la campa entre Acciona y CENER se realizará una concentración.