Ante la agresión sexual ocurrida en la calle Jarauta de Iruñea
La Plataforma de Mujeres contra la Violencia Sexista de Nafarroa mediante esta nota y al hilo de las informaciones en relación a la agresión sexual sufrida por una mujer en la calle Jarauta quiere manifestar lo siguiente:
2019-ko apirilak 25
En primer lugar queremos mostrar nuestro apoyo y solidaridad a la mujer agredida y trasladarle todo nuestro cariño en estos momentos tan complicados.
Dicho esto, una vez más queremos reiterar que las agresiones sexistas no son sucesos aislados ni “cosas” que les pasan a algunas mujeres. La violencia que sufrimos las mujeres es estructural y universal y todas las agresiones, de la intensidad y la forman que sean tienen que ser rechazadas de manera firme, todas, sin excepción. Una vez más insistimos en que tildar unas agresiones de más o menos graves solo consigue justificar unas agresiones frente a otras. La gravedad de una agresión la determinan las mujeres que la han sufrido y no los hechos en sí.
De igual modo el tratamiento informativo que algunos medios de comunicación han dado a este caso en particular, con entrevistas a los agresores o detalles escabrosos sobre cómo se dio la agresión no hacen más que alimentar el morbo, revictimizar a la mujer que ha sufrido la agresión y poner en el foco de la noticia cuestiones que nada tienen que ver con los motivos por los que las mujeres sufrimos violencia, que no es otro que el sistema heteropatriarcal al que nos someten.
Desde la Plataforma, una vez más, queremos denunciar como ya hemos hecho en otras ocasiones, la actuación absolutamente irresponsable de quienes lejos de proteger, acompañar y asegurar el bienestar de la mujer agredida han dedicado sus esfuerzos a filtrar a los medios de comunicación informaciones sesgadas y malintencionadas que distan mucho de la responsabilidad y seriedad con la que ha de tratarse la violencia contra las mujeres y que han atentado gravemente contra la intimidad y con la petición expresa de que la agresión no se hiciera pública por parte de la mujer agredida. Así mismo también queremos dejar constancia de que por enésima vez no se han respetado los protocolos establecidos y que la mujer agredida a la hora de interponer la denuncia no tuvo asistencia letrada, ni médica ni por supuesto psicológica. De nada sirven los recursos existentes para asistir a mujeres que sufren violencia si quienes tienen obligación de informar y proveerlos no se implican en su cumplimiento, saltándose los protocolos de actuación establecidos y enviando comunicados de prensa que fomentan el amarillismo y conllevan un grave perjuicio para la mujer agredida.