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En el tercer aniversrio de la muerte en comisaria de Ehladji Ndiaye, una concentración de recuerdo al joven senegales muerto en comisaría ha querido denunciar los 3 años “de impunidad y silencios cómplices” sobre este suceso que comnocionó a la comunidad africana afincada en Iruñea. “Frente al olvido impuesto”, las personas concentradas hoy por la tarde en la Plaza del Ayuntamiento de Iruñea han querido marcar esta fecha en el calendario de la memoria colectiva para no olvidar “lo que nunca debió suceder”.

“Las preguntas que nos llevaron a denunciar su muerte siguen siendo las mismas que hoy nos reúnen en esta plaza, seguimos sin saber por qué le detuvieron, seguimos sin entender la violencia empleada ni por qué lo trasladaron a comisaría en vez de a un centro médico, o porqué consideraron que su detención era más importante que su propia vida y no queremos entenderlo, nos indigna. Nos recuerda la importancia de la lucha por defender nuestras vidas de las múltiples violencias que el sistema establece y ejerce, por seguir denunciando las fronteras invisibles que configuran nuestras ciudades y barrios en forma de controles de identidad racistas, en forma de leyes como la de extranjería y otras tantas formas como tiene el racismo institucional de manifestarse, fronteras que no solo hay que atravesar, sino que nos atraviesan y dividen cada día”, han denunciado.

Han exigido implantar protocolos verificables respecto a las actuaciones e intervenciones policiales y cambiar la normativa y el modelo policial. “Esto pasa por seguir visibilizando y denunciando las carencias y discriminaciones estructurales y seguir señalando la vía judicial como cómplice del sistema y de su racismo institucional”, han asegurado.