ahötsa_

Una concentración que reunió a decenas de personas denunció el pasado sábado el último ataque fascista ocurrido en la zona y que consistió en la realización de pintadas amenazantes en la fachada de la sociedad Zubiondo. Desde esta entidad cultural y gastronómica quisieron incidir en la impunidad de sus autores.

Por otro lado, en el Fuerte de Ezkaba, donde miles de personas sufrieron la represión franquista tras el golpe fascista de 1936, han vuelto a aparecer pintadas en las que se escenifican fusilamiento y se hace un llamamiento a “continuar la lucha” como “el mejor homenaje”. Estas pintadas se acompañan con banderas españolas y mensajes unionistas y contra ETA.