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A esto tendríamos que sumarle las condiciones impuestas por el propio capitalismo en forma de crisis económicas o represión de los servicios públicos, más conocidos como recortes. Con sus correspondientes privatizaciones.

Esto siempre, a mi manera de entender ha estado muy latente en la capital de nuestro bonito país, Iruñea. Donde durante todo este periodo el movimiento asociativo ha resultado ninguneado, expropiado y cuartado por el capital. No hablamos de nada nuevo, viendo como en esta región nos han expropiado nuestros bancos, o las propias montañas con proyectos de alta velocidad etc. Todo este entramado ha sido manipulado como siempre desde los altos estamentos que el neoliberalismo ha creado para controlar las masas que tanto anhelan atrae con sus medios de manipulación. Pero lo más preocupante ha sido el ataque que hemos sufrido en los últimos años, el ataque hacia lo más identitario de esta tierra, el ataque a lo que nos ha hecho pueblo, nación y lo que decidamos ser. ¡El ataque al AUZOLANA! ¿Cuál ha sido la estrategia que el anterior gobierno, con sus cómplices ha ejecutado para atacar la esencia de nuestro pueblo? Yo me niego a que esto citado anteriormente se pueda convertir en realidad, porque este pueblo, una vez más, está reaccionando a vuestro ataque y estamos organizados. No importa los impedimentos que nos pongáis a la hora de apaciguar nuestra lucha, somos campeones olímpicos en 500 años vallas y ninguna de esas vallas nos va a derribar.

Porque si, porque esto es lo que caracteriza a Euskal Herria, el Auzolana y por nada más que el hecho de que no sabéis lo que significa esta palabra, como hace poco se escuchó otra vez “estamos aquí para ganar”. Por eso mismo este año más que nunca con todo nuestro musculo y potencial lo volveremos a conseguir. Llegaremos al acuerdo de cómo organizar NUESTRAS instituciones, para incidir en el pueblo y lo más importante de todo, por primera vez llenaremos de valor nuestras plazas, calles, barrios, pueblos y ciudades. Y no precisamente de valores añadidos, ni de beneficios económicos. Si no de valores sociales, de valores morales. Esos valores que siempre hemos echado tanto en falta.

Gracias a la reflexión nos estamos continuamente reinventado, se comenzó con una pequeña organización en contra de vuestras políticas privatizadoras, cogió carácter de coordinación de nuestros diferentes barrios, fue ganando la referencialidad desde la perspicacia de la oposición, se gestó la ocupación de pequeños espacios, conseguimos nuestro espacio, lo mejoramos y le dimos color tanto al espacio como la ciudad y este año otra vez mas nos vamos a reinventar, con el Herri Gune. Se la vamos a ofrecer, le vamos a ofrecer la ciudad a las que realmente se lo merecen. Y no, no hablamos de la Heineken ni de los cuarenta principales, se la vamos a ofrecer al pueblo, para que disfrute de lo que es suyo, de su ciudad, su cultura, su ritmo… Para que el pueblo decida ser lo que el pueblo quiera ser. ¡Y esta vez sin referéndum! Porque el pueblo ha hablado y ha gritado una vez más

¡GORA SANFERMIN HERRIKOIAK! ¡GORA SANFERMIN PARTEHARTZAILEAK! ¡GORA SANFERMIN PAREKIDEAK!