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Las situaciones vividas esto últimos meses en los distintos programas dedicados a la intervención social que desarrolla la Fundación Ilundain ha sido el detonante para que sus trabajadoras salgan a la calle. Denuncian el incremento de los insultos, amenazas y agresiones graves por parte de usuarios y usuarias.

Preocupados por su salud e integridad física, pero también por la calidad del servicio que ofrecen, desde el Comité de Empresa de Fundación Ilundain Haritz-Berri nos se han reunido con diferentes responsables del Gobierno de Navarra, tanto de Políticas Sociales como del Departamento de Educación y Parlamento de Navarra. La respuesta que han recibido en todas y cada una de las reuniones les hace preveer que la situación que viven no va a mejorar a corto ni medio plazo.
“El Gobierno de Navarra nos dice que no hay dinero, y obviando nuestra situación, nuestras condiciones laborales, e incluso la ley, parece van a licitar el Concurso de Residencias a 80 horas más que la licitación anterior, a un precio de mercado por debajo del precio de la vida en Navarra”, denuncian. “Y así es imposible mejorar la calidad del servicio que prestamos, imposible mejorar la intervención que hacemos”, aseguran.

Se muestran cansadas de ser las trabajadoras quienes asumen “las deficiencias del sector, hartas de tener la sensación de ser las únicas que diariamente nos comprometemos, y muchas veces hasta el límite, con nuestros usuarios y usuarias”.