Opción libre de vacunas

Los y las abajo firmantes hacemos las siguientes consideraciones a las autoridades públicas y a la opinión pública en general. Si bien ciertas medidas tomadas por las autoridades públicas nos parecen pertinentes y oportunas, la actual medida denominada “pasaporte COVID” nos parece a todas luces desproporcionada, injustificada y conculcadora de nuestros derechos fundamentales básicos.

Bitor Abarzuza Fontellas y 58 firmas más

2022-ko urtarrilak 4

Como se recoge en diferente legislación sanitaria, las personas tenemos derecho a decidir sobre nuestro propio cuerpo, debidamente informados, entre las opciones y tratamientos médicos. La medida actual ha clasificado a la sociedad en dos grandes bloques, vacunados y no vacunados, impidiendo a uno de ellos acceder a servicios de empresas privadas y entidades públicas en nombre de la protección general y la evitación del contagio; cuando se sabe a ciencia cierta, que es la propia vacuna la que ni protege del contagio ni inmuniza por sí misma. Esta clasificación social ha desencadenado consecuencias sociales y mediáticas que van más allá de lo sanitario hacia la discriminación y el aislamiento social de las personas que libremente optan por no inocularse el tratamiento farmacéutico auspiciado por el gobierno y acogerse a otro tipo de medidas de carácter profiláctico. Entre otras, llevar una vida sana y saludable. A este punto, la medida discriminatoria y prohibitoria llega al absurdo de prohibirnos acceder a instalaciones públicas deportivas, por lo que nos preguntamos si la medida no es sino una simple forma de castigo por no adherirnos a la apuesta del gobierno por un tipo de tratamiento.

Queremos manifestar que, por supuesto, la opción de vacunarse nos parece legítima y entra dentro de la misma autonomía del paciente que reivindicamos, esto es, que cada cual elija aquello que le parece más interesante para su salud y su cuerpo, lo que es un derecho de interés general. Nosotros y nosotras, sin embargo, no prohibimos a nadie acceder a ningún sitio por el hecho de optar por un tratamiento u otro, ni le impedimos a nadie ejercer sus derechos fundamentales. La medida nos retrotrae a lugares y momentos en la historia de los que creíamos la humanidad había aprendido algo. No somos cobayas ni animales de experimentación, somos seres humanos adultos, con razonamiento, capacidad de decisión y con derechos. Derechos que en estos momentos se nos están conculcando.

Nos dirigimos a las autoridades públicas en la esperanza de que sepan de las consecuencias de la medida que han adoptado, del efecto dominó que han creado hasta el punto del linchamiento de ciertos medios de comunicación y la animadversión manifiesta hacia nosotros y nosotras, lo que raya en ocasiones el delito de odio, así como el añadido de crispación al interior de la sociedad, entre familiares o amistades o en el entorno laboral o de las entidades civiles.

Por todo ello, solicitamos se haga una reflexión serena de la situación creada, más allá de los cálculos electorales, pues creemos que esta medida discriminatoria puede acarrear todavía consecuencias sociofóbicas aún peores. Nos preguntamos si todo esto no corresponde a la actual escasez de ideas sobre cómo seguir afrontando esta pandemia; pues parece, finalmente, que el pase COVID no es sino una forma de presión para que todo el mundo se adhiera al tratamiento elegido por el gobierno, imponiendo prohibiciones y restricciones.

Gehiago