Europa por una sanidad para todas y todos
Felix Zabalza. Nafarroako Osasun Plataforma /Plataforma Navarra de Salud.
2018-ko apirilak 7
Este 7 de abril, DÍA MUNDIAL DE LA SALUD, la Red Europea contra la privatización y la comercialización de la salud y de la protección social inicia la campaña “Un año por una sanidad para todas y todos”, con la mirada puesta en las próximas elecciones europeas de 2019, con el objetivo de forjar compromisos por parte del mundo de la política para llevar adelante iniciativas de defensa del derecho a la salud y para frenar los fenómenos de mercantilización-privatización que en distintas formas se sufren en toda Europa. La campaña se centra en cuatro ejes que dibujan el modo en el que avanzan los
peligros para nuestros sistemas públicos de salud europeos.
El primero de ellos, “Postergar la atención” hace referencia a cómo la población se
enfrenta a un entorno de restricción en el que no se le permite tener acceso a la atención
necesaria o deseada, aduciendo razones presupuestarias.
El segundo de los ejes, el dedicado a las “Aseguradoras privadas”, explica la manera
en que se mercadea con la salud, rompiendo todo principio de solidaridad y equidad pues
bajo el imperio de las aseguradoras, quien más posibilidades económicas tiene accede a
mejores prestaciones, mientras la población más vulnerable se va quedando excluida de
la protección de la salud.
En tercer lugar, denuncia al “Complejo industrial médico-farmacéutico” por su
opacidad, su inaceptable presión sobre los estados a través de un potente “lobby” para
fijar elevados precios que no tienen relación alguna con los costes de producción y
desarrollo de los fármacos.
Por último, las “Externalizaciones”, las múltiples formas en las que se cuartean los
sistemas públicos de salud, subcontratando cada vez más lotes en servicios auxiliares, en
servicios técnicos o en atención directa, fortaleciendo al sector privado en detrimento de lo
público.
Estos cuatro ingredientes, con distintas proporciones y dependiendo de la capacidad
de resistencia de quienes defendemos nuestros sistemas sanitarios públicos, se dan en
todas las recetas neoliberales que rigen las políticas sanitarias europeas. En
nuestro entorno más cercano, también.
Respecto a la falta de accesibilidad y la postergación de la atención, además de la
problemática de las listas de espera, recientemente hemos recibido un mazazo judicial
que dinamita la universalidad sanitaria en Navarra pues el Tribunal Constitucional
ha considerado nula la Ley navarra que reconocía el derecho a la sanidad a toda la
población, incluida la que padece situación de irregularidad administrativa.
Sobre las aseguradoras privadas, no debemos olvidar que las Mutuas patronales lo
son y constituyen un sistema de salud paralelo al que se accede por el hecho de
trabajar y en el que el bien a proteger no es realmente la salud sino la fuerza de
trabajo, negando bajas médicamente necesarias, acelerando procesos de cara a
asegurar una pronta incorporación al trabajo, derivando pruebas a los negocios sanitarios
privados etc., todo ello, utilizando fondos de la Seguridad Social.
Navarra ha sido la única Comunidad que ha reducido el gasto farmacéutico el último año,
algo positivo pues la tendencia de los últimos años ha sido creciente. En este punto cabe
reflexionar también sobre la propia responsabilidad de la población pues demandamos, y
acumulamos, cada vez más medicamentos, haciendo el caldo gordo a la industria
farmacéutica. La medicalización de nuestras vidas, ligada entre otros factores a
una atención primaria débil, es un fenómeno que sólo beneficia a los
laboratorios.
Finalmente, las externalizaciones, algo bien conocido en estas tierras. El modelo de
privatización parcial a través de conciertos sanitarios sigue tan vigente como
siempre (CUN, SJD, San Miguel, resonancias, ecografías,…). Además, servicios
auxiliares como lavandería, limpieza, informática, etc., siguen estando privatizados.
Por ello, el 7 de abril debemos recordar que LA SALUD NO ES UNA
MERCANCÍA MÁS, SE TRATA DE UN DERECHO UNIVERSAL que
debemos defender día a día y en todos los lugares, ahora más que
nunca.