ahötsa_

Hay pensiones vergonzosas con las que es difícil llegar a fin de mes. Y, que vamos a decir de las pensiones de viudedad o del absoluto abandono en que se deja a las amas de casa que han dedicado toda su vida a cuidar del marido y de los hijos y al final tienen que vivir de la pensión de su pareja?

Con la excusa de que no hay dinero para las pensiones llevan tiempo preparando el terreno para privatizarlas, convirtiendo con el tiempo las públicas en pensiones de beneficencia.. Por si faltase algo, llega la Unión Europea y condiciona la entrega del dinero de los famosos fondos europeos, entre otras, a la reforma de las pensiones ¡¡ Éramos pocos y parió la abuela!!

Ha sido también un acierto el pasar la iniciativa a toda la sociedad, no solo a los pensionistas, porque el futuro es aún más negro para las generaciones que vienen.

Y también acertó comunicando la iniciativa a las diversas plataformas de pensionistas del Estado para que el grito de protesta sea común en todos los pueblos.

Es nuestro compromiso que aquí, en Navarra, ese día sea histórico, como fueron históricas aquellas movilizaciones de hace más de 3 años cuando conseguimos tumbar el 0,25%,, movilizaciones que superaron la barrera de las siglas; nacían de un largo hartazgo.

Pero a día de hoy, nos encontramos que la mayoría de las organizaciones de personas jubiladas de Navarra no apoyan esta convocatoria. Y esto nos remite al tema de la unidad, ansiada por todos pero difícil de conseguirla en la práctica. Y al hablar de ello, recordamos aquella frase lapidaria “El que no tenga culpa que tire la primera piedra”. Tenemos que tener muy presente todos, que separados somos muy fáciles de vencer, mientras que unidos, el día que lo consigamos, seremos invencibles ¿Qué gobierno es capaz de desoír las protestas de millones de votantes jubilados? Ninguno.

Puede ser que para algunas organizaciones sea el contenido lo que dificulta la unidad para el día 29, para otras no y en buena armonía seguro que hubiéramos llegado a un acuerdo como lo hemos hecho varias veces.

Si no partimos de la realidad sociológica de Navarra, una realidad variopinta, donde se entrecruzan opciones nacionales y sociales distintas, es difícil avanzar en la unidad para actividades conjuntas.

Vemos con esperanza como en diversos pueblos están surgiendo grupos de personas jubiladas que se mueven en busca de soluciones a los problemas de la jubilación, al margen de siglas. Del contacto y trabajo en común de estos grupos puede surgir un movimiento amplio, plural y autónomo en Navarra.

Ahora lo que toca es olvidarnos de las siglas y abarrotar las calles el día 29, para que se oigan nuestras justas reivindicaciones, no solo las de los pensionistas, si no las de todo el pueblo, puesto que todos nos jugamos mucho, ya que a todos nos van a afectar las medidas que el gobierno está dispuesto a tomar en los próximos meses. Que nuestras voces se unan a las de los otros pueblos del Estado, solo así podremos salvar el Sistema Público de Pensiones que asegure pensiones públicas y dignas.

Nos vemos el día 29.