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En el mejor de los escenarios posibles previstos por el Departamento de Educación, el 4 de septiembre nuestras 59 hijas e hijos iniciarán el curso de manera presencial divididos en dos líneas. En nuestra opinión se trata de grupos demasiado numerosos teniendo en cuenta que Eunate está alojado en un edificio antiguo, de aulas pequeñas, pasillos estrechos y muchas deficiencias materiales. Hay matriculados para el curso que viene 188 chicos y chicas en ESO y 158 más en Bachiller y el centro sólo cuenta con cuatro aulas lo suficientemente espaciosas como para poder cumplir adecuadamente los requisitos que exige la nueva situación sanitaria. 

Nuestras criaturas van a vivir un cambio de etapa muy importante en sus vidas y en sus procesos formativos. Llegan, además, tras un fin de curso y de ciclo totalmente extraño que les obligará a ellos y al profesorado a trabajar duramente para recuperar todo lo que se pudo perder durante el confinamiento en cuanto a contenidos académicos. Es, de por sí, un momento muy delicado de la vida y más en las atípicas circunstancias actuales. Por ello necesitan más atención académica y apoyo emocional que nunca. Entendemos que la situación económica es muy dura y que el Departamento tiene un presupuesto limitado, pero las madres y padres creemos que deberían reconsiderar la decisión y dar la oportunidad de abrir en Eunate una tercera línea en primer curso de la ESO. Esta es la petición que le hacemos las familias al Director general de Educación de manera unánime, con el respaldo del profesorado, del equipo directivo del centro y de la APYMA. Entendemos que la actual decisión cumple con la legalidad vigente, pero dadas las circunstancias, vemos imprescindible encontrar nuevas soluciones que no pongan en riesgo la calidad educativa y la seguridad sanitaria de toda la comunidad escolar y sus familias.