ahötsa_

UPN-PPN hicieron ayer todo un esfuerzo por nadar y guardar la ropa y trataron de posicionarse con un pie casi en contra del traslado del 70% de las funciones de los laboratorios del Reina Sofía a Pamplona, mientras con el otro pie desestimaban e incluso deslegitimaban (desde el PPN) las reivindicaciones y protestas ciudadanas que, a través de la Plataforma Ribera en Defensa de la Sanidad Pública, presentó la oposición en el pleno. En lugar de apoyar las reivindicaciones de esta asociación (acometer las inversiones pendientes como los quirófanos, la quinta planta de oncología y recursos para ecografías y mamografías) y asumir la petición de que “todas las analíticas de centros de salud de la Ribera sigan haciéndose en el Reina Sofía”, prefirieron acusar a la plataforma de estar “haciendo partidismo con la salud pública” y de hacer un uso “deleznable de los menores” llevándolos a movilizaciones. Lejos de ello, se quedaron en “instar a que el Gobierno se replantee el proyecto de unificación y si se lleva a cabo que se garantice, al menos, la misma calidad”. El edil de I-E, Eneko Larrarte, les recriminó lo rebuscado de la reivindicación, “pedimos que no se lleve a cabo, pero si se lleva a cabo exigimos que, si no se cumple la calidad, no se lleve a cabo”.

Tanto el portavoz socialista Manuel Campillo, como la de I-E, Milagros Rubio, pusieron sobre la mesa la pregunta de “¿cuál es la finalidad del traslado cuando no lo es mejorar la calidad (avalada por el ISO), ni abaratar costes (se han ahorrado 900.000 euros entre 2011 y 2014 en Tudela)?”.
Alrededor de 300 personas estuvieron presentes a las puertas del Consistorio durante una hora haciendo sonar cacerolas como forma de protesta y unas 100 de ellas subieron más tarde al pleno.
Finalmente, con la abstención de PSN e I-E, UPN y PPN aprobaron su moción en la que “instaban” al Gobierno de Navarra a “cumplir su compromiso de instalar el centro Oncológico en la quinta planta, restringir al máximo las derivaciones a Pamplona y que no se produzcan desplazamientos de pacientes por la unificación”. En el punto clave PSN e I-E votaron en contra, pero la mayoría de UPN-PPN sacó adelante “instar a que Salud se replantee el proyecto del laboratorio, pero caso de que siga adelante no se lleve a cabo hasta que se garantice la calidad”.

UPN-PPN El portavoz popular, Enrique Martín, comenzó defendiendo “la salud pública” y criticando las movilizaciones por lo que recibió numerosas recriminaciones del público y su contestación fue exigir al alcalde que “desaloje la sala si no me dejan hablar”, si bien el alcalde, Luis Casado, consiguió templar los ánimos.
Martín preguntó a I-E por qué no se “manifestaban en Andalucía donde han reducido personal y presupuesto en Sanidad, o será porque les han dado la patada”. El portavoz popular negó que la movilización social “sea necesaria para defender la sanidad pública” y, curiosamente, defendió la calidad de la de Navarra mucho más, que el propio UPN. En una segunda intervención estimó que los laboratorios de Tudela han reducido en un 40% sus costes por lo que hizo hincapié en que pedía “reconsiderar la postura. Nunca nos hemos opuesto a la unificación pero pedimos que no tenga repercusión en el paciente”.

Desde UPN, Joaquín Torrents, fue mucho más crítico con el Gobierno que el PPN y recordó que “desde este partido hemos pedido que Tudela tenga el trato que merecemos y no nos han dolido prendas en reclamar”. Torrents hizo hincapié en el texto de la moción que aprobaron “el laboratorio funciona y por eso pedimos que se replantee la decisión, que se licite Oncología y que se restrinjan las movilizaciones. No vemos que se vaya a mejorar la calidad y por eso pedimos que se lo replanteen”, insistió. Al mismo tiempo, distanciándose del PPN, elogió las movilizaciones por lo que destacó que los logros del Reina Sofía se habían conseguido “con la complicidad de la ciudadanía”.

PSN e I-E PSN e Izquierda-Ezkerra asumieron como propias las peticiones de la Plataforma en Defensa de la Sanidad Pública que presentaron una moción en la que recordaban que, después de tres años del anuncio de Vera “seguimos sin conocer ningún estudio o informe que acredite las razones aducidas por Salud” y recordaron que en la privatización de las cocinas Comptos había dicho que “se produjo un aumento de costes en lugar de ahorro”. Al mismo tiempo apuntaron que el traslado “aumenta la brecha territorial” y recordaron que el Gobierno en la ETN de 2007 señalaba “dar a Tudela servicios de una gama de rango superior para ser núcleo de referencia”.

Por I-E, Milagros Rubio recordó a Martín que “la llegada de este hospital se debió a este tipo de movilizaciones”. Rubio echó en cara a UPN y PPN el hecho de que “si no existe ningún informe que avale el ahorro de costes ni la mejora de calidad ¿por qué se hace, a dónde nos lleva esto: A intereses de terceros, a la privatización?, ¿tratan de desmantelar el hospital?”. La portavoz de Izquierda-Ezkerra recordó que “cuando se consiguió la llegada del hospital luchábamos por mejorar, ahora lo hacemos por mantener lo conseguido”.

Manuel Campillo, por el PSN, agradeció la labor de la plataforma dado que “sin las movilizaciones no hay avances sociales”. Al igual que Rubio se preguntó “¿por qué quiere el Gobierno desmantelar el 70% de los servicios del laboratorio?, ¿mejora la rapidez, la eficacia o la calidad?”, cuestionó. Dentro de estas estimaciones recordó que Vera en Tudela señaló que se iban a ahorrar 7 millones de euros con la centralización de los laboratorios, “es la única cifra que se conoce y, curiosamente, ya se han ahorrado”, indicó. En este sentido explicó que en 2011 se gastaron (sin personal) 1,9 millones, una cifra que pasó a 1,5 en 2012 y en 2013 y 2014 bajó al millón de euros “casi un 50%”, apuntó y añadió “a quién beneficia pues cambiarlo?, a la Ribera desde luego, no”. Desde I-E también habló el concejal Eneko Larrarte para afirmar que “Vera, por enésima vez ha generado controversia en la sociedad y en los técnicos”. Larrarte pidió a Martín “un respeto por el trabajo de la Plataforma que se moviliza por su salud y la mía” y con respecto al partidismo del que le acusó el PPN señaló que “quien les trae aquí es la señora Vera, ni PSN, ni I-E”. Además recordó que desde 2011, UPN y PPN se han ido acercando a las “peticiones de la Plataforma”, y añadió que “lo que ahora hace falta es que retiren su moción y apoyen la de la plataforma”, sin obtener respuesta.

EN EL BANCO
Intervenciones. Una trabajadora de los laboratorios que lleva 25 años en su puesto destacó que “no pertenezco a ningún partido ni sindicato y no es cosa de cuatro pirados como desmuestra la cantidad de apoyos de colectivos que hemos recibido. Deberían ponerse las pilas y escuchar a los ciudadanos”. Por otra parte una madre contestó a Martín señalando que “llevo a mi hija a las movilizaciones para que sepa que debe luchar por lo de todos”.
 

ENFRENTAMIENTO
El público. La intervención inicial de Martín generó muchas críticas y entre el público se pudo oír “no estamos aquí para que nos insulten”, “no hace falta que nos desalojen que nos vamos” o “desalojen ustedes esas mesas”.