Trabajadoras de las limpiezas públicas hospitalarias ven peligrar sus puestos de trabajo ante una inminente privatización de dicho servicio

Personal de limpiezas hospitalarias se ha concentrado frente al nuevo edificio de urgencias para denunciar que el modo de gestión de esta nueva instalación va a suponer pérdida de puestos de trabajo en limpiezas. Además han afirmado que esto supone un paso más en la privatización de servicios públicos.

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Los trabajadores llevan meses concentrándose los jueves a las mañanas y a las tardes ante la puerta principal del Complejo Hospitalario, en defensa del servicio público de limpiezas. Ya han comenzado los despidos en el servicio de limpiezas de al menos una persona. Pero en los próximos días todo hace pensar que la cifra se irá engordando.

A día de hoy el servicio de limpiezas públicas hospitalarias que cuenta con una eventualidad del 85% de la plantilla, lo conforman mas de 40 trabajadoras que ven peligrar dichos puestos de trabajo con la inauguración y puesta en marcha de nuevos pabellones hospitalarios. En el año 2000 comenzó la lenta y progresiva privatización de pabellones hospitalarios que llega hasta nuestros días con la apertura del pabellón C y el edificio de Urgencias.

A pesar de que la Consejera Vera aseguró públicamente que no se va a extender la privatización de la limpieza a más pabellones del Complejo Hospitalario, los trabajadores de la limpieza no se creen estas palabras. Y motivos tienen puesto que en una ocasión, la directora de Personal del Complejo, en una reunión con la representación sindical, habló de la total desaparición de la plantilla pública de limpiezas a medio plazo.

Vera no ha presentado ninguna explicación que aporte datos acerca del resultado económico de la privatización o sobre la calidad resultante de privatizar el servicio de limpiezas. Pero de antemano ya se prevee que será más caro, habrá despidos y precarización de condiciones laborales de los trabajadores, asi como la consiguiente merma en la calidad del mismo. A pesar de las nefastas consecuencias de las privatizaciones sanitarias, Vera continua desmantelando servicios públicos bajo la etiqueta de la externalización. Si ayer fueron las cocinas, hoy son las limpiezas, mañana ¿qué será, mantenimiento, exteriores o el almacén del CHN?

 

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