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SOS Racismo ha presentado el “Informe Anual sobre el Racismo en Navarra 2024”, un documento que expone la persistencia de la discriminación racial en distintos ámbitos y recoge algunos de los relatos que las personas afectadas han compartido. Los datos y análisis reflejan un patrón sistemático de vulneraciones de derechos contra personas migradas y racializadas, opinan desde SOS, que viene alertando de estas situaciones desde hace mucho tiempo, haciendo hincapié en la precarización de la vida de muchas familias migrantes, algunas con menores, que han llegado a situaciones extremas como el sinhogarismo. “Denunciamos, además, que varios Departamentos del Gobierno de Navarra han incurrido en prácticas incompatibles con la Convención sobre los Derechos de la Infancia, evidenciando un grave incumplimiento de compromisos internacionales”.

El informe también analiza el impacto “de las necropolíticas migratorias” sobre centenares de jóvenes que migran solos “y que son condenados a la exclusión y la incertidumbre jurídica”. También documentan las condiciones laborales precarias que enfrentan los obreros migrantes en la construcción del Tren de Alta Velocidad (TAV), resaltando la necesidad de garantizar condiciones de trabajo dignas y libres de discriminación.

Otro de los problemas estructurales que abordan es la dificultad de acceso al padrón y a procedimientos de regularización, lo que perpetúa la exclusión social y laboral.

En 2024, la Oficina de Atención y Denuncias (ODAS) de SOS Racismo Navarra registró un aumento del 37.75% en los casos atendidos con respecto a 2023, alcanzando un total de 208 denuncias. Además, las denuncias de vulneraciones por parte de la administración pública aumentaron del 68% en 2023 al 76% en 2024. También se detectó un aumento significativo en el porcentaje de personas atendidas en situación administrativa irregular, pasando del 41% en 2023 al 53% en 2024, lo que refleja un agravamiento de las barreras institucionales para la regularización de derechos.

“Es importante señalar que el número de casos registrados en nuestra Oficina no refleja la totalidad del problema. Existe una gran cantidad de situaciones de racismo y xenofobia que no llegan a ser denunciadas debido a la continua inacción falta de reconocimiento y reparación de las situaciones de discriminación, esto genera la desconfianza en las instituciones. La infradenuncia oculta una realidad aún más alarmante y refuerza la impunidad de las estructuras racistas. Debemos seguir señalando a la Ley de Extranjería como una de las mayores herramientas legales de discriminación, generando categorías de ciudadanía y justificando la vulneración de derechos”, dicen desde SOS Racismo.

El informe también pone de manifiesto “cómo el racismo estructural afecta a trabajadoras y trabajadores migrantes en general, atrapándolos en un sistema de explotación y precarización” y se denuncian “las dificultades en el acceso a la sanidad, la educación, la vivienda y el reconocimiento de derechos fundamentales, así como la criminalización sistemática de personas racializadas”.

SOS Racismo propone medidas concretas para combatir el racismo institucional y estructural, como garantizar los derechos de las personas migradas y racializadas sea cual sea su situación administrativa, instar al Gobierno español a realizar cambios normativos clave y apoyar la regularización de las personas migrantes, implementar protocolos en la Administración contra el racismo, eliminar los controles policiales basados en perfil étnico y dejar de colaborar con las expulsiones, revisión crítica de la historia para reconocer el daño causado al sur global y al pueblo gitano…

“Este informe es un llamado a la reflexión y la acción. Invitamos a las instituciones, la sociedad civil y los medios de comunicación a sumarse y a comprometerse con la erradicación del racismo”, concluyen.