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El próximo sábado 18 de octubre, AHT Gelditu! Nafarroa, con el apoyo del sindicato agrario EHNE, llevará a cabo una marcha montañera para visibilizar los efectos negativos del Tren de Alta Velocidad (TAV) en la vida rural y las tierras de cultivo. La marcha comenzará a las 9:00 horas en Muru Artederreta, uno de los pueblos más afectados por esta macroinfraestructura, y finalizará a las 14:30 horas tras un recorrido circular que pasará por la localidad vecina de Olkotz.

El objetivo de la marcha es denunciar “cómo las obras del TAV están alterando drásticamente la vida de los pueblos y destruyendo algunas de las mejores tierras de cultivo” de la zona. Según los organizadores, el trazado del tren y las escombreras generadas por los materiales sobrantes de los túneles “han provocado la pérdida de superficie agrícola y la transformación del paisaje”. Así, en el subtramo Tafalla-Campanas, actualmente en construcción, se han excavado tres túneles que suman más de 1.600 metros de longitud, generando grandes cantidades de escombro. Muchas de las escombreras provisionales previstas en el proyecto inicial se han convertido en permanentes, alcanzando alturas de hasta cinco metros y reduciendo la capacidad de cultivo de las tierras afectadas, indican.

Además, el sindicato agrario EHNE ha denunciado la pérdida de las ayudas de la Política Agraria Común (PAC) para los agricultores afectados, sumada a los bajos precios pagados por las expropiaciones. En una rueda de prensa celebrada esta primavera, EHNE reveló que Nafarroa ha perdido 21.000 hectáreas cultivables debido a la artificialización de terrenos para infraestructuras como el TAV y el Canal de Navarra, una superficie equivalente al parque natural de Urbasa-Andia.

La marcha también busca solidarizarse con los vecinos de las localidades afectadas y concienciar sobre la importancia de proteger la soberanía alimentaria en un contexto de crisis ecológica global.