Los centros sanitarios privados “van a lucrarse de la atención a pacientes con Covid-19”, denuncian
La Plataforma Navarra de Salud critica que desde el erario público se pague la atención ofrecida por la sanidad privada en base al precio concertado, y se preguntan entonces qué ha aportado la red privada en esta pandemia. Aseguran que se trata de "un rescate" para estos centros, en un momento en el que lasu actividad "estaba totalmente paralizada". Critican también que la red privada haya hecho test de coronavirus cuando los recursos eran escasos en vez de centralizarlos en la red pública.
2020-ko maiatzak 28
La Plataforma Navarra de Salud/Nafarroako Osasun Plataforma, ha podido conocer la respuesta dada el 26 de mayo de 2020, por parte del Servicio de Atención Ciudadana y Pacientes del Servicio Navarro de Salud-Osasunbidea a una serie de cuestiones que realizó a título individual uno de sus miembros, en referencia a la atención a pacientes afectados por Covid-19 derivados de la red sanitaria pública a la privada.
Si bien algunas cuestiones han quedado sin respuesta por distintos motivos, desde esta Plataforma nos queremos referir a los aspectos en los que encontramos alguna certeza.
En primer lugar, respecto a la facturación de dichas derivaciones, se informa de que “el coste de la atención en centros concertados se va a pagar según tarifas contratadas con cada centro, incrementado en un porcentaje similar al sobrecoste que supone el paciente COVID respecto al paciente no COVID. Dicho similar al sobrecoste se va a calcular tomando como referencia el coste de los últimos pacientes ingresados en el Complejo Hospitalario de Navarra. En cuanto al total del gasto, todavía se está en período de negociaciones y no se ha cerrado ninguna cantidad, a la espera de identificación de los costes en los hospitales de la red pública.”
Por otra parte, respecto a los procesos clínicos atendidos, se dice que “Las entidades con las que se ha contado para la atención de pacientes derivados y el número de personas atendidas han sido: Clínica Universidad de Navarra: 154; Hospital San Juan de Dios: 147; Clínica San Miguel-CSM: 52. En cuanto a los test realizados en dichos centros: Cada centro tiene su propio protocolo de realización de test, y hay que destacar que la mayoría de los pacientes ingresaban ya con el test realizado en el propio Complejo Hospitalario de Navarra.”
Ante estos datos, queremos manifestar:
1- Que el papel de la red privada en el afrontamiento de la pandemia, a tenor de los casos atendidos: 353, ha sido muy secundario. Decir que a fecha de 22 de mayo, el Complejo Hospitalario aportaba respecto a los pacientes atendidos en sus centros, los siguientes datos de atención: 81 personas ingresadas, 975 altas, 185 fallecimientos, 168 traslados a otros centros y 34 traslados a centros de atención socio-sanitaria. Si sumamos a estos datos los pacientes atendidos en los hospitales Reina Sofía y García Orcoyen y los atendidos por la red de Atención Primaria, se constata que es la sanidad pública la que ha soportado la ingente presión asistencial derivada del Covid-19.
2- Los centros privados van a lucrarse de la atención a pacientes con Covid-19 pues se les pagará por dicha atención en base al precio concertado, del cual, como entidades privadas que son, obtienen un lucro. Dicho lucro se garantiza pues se va a calcular un porcentaje que añadir al precio habitual, en base a los costes de la atención al Covid-19. Es decir, no aportan nada, no arriesgan nada, no tenemos nada que agradecerles. Transferirles pacientes supone más bien un rescate para estos centros, en un momento en el que la actividad sanitaria privada estaba totalmente paralizada.
3- Respecto a los test, resulta incomprensible que no haya criterios unificados exigibles a todos los centros en base a los criterios de quien paga (Osasunbidea), en un momento en que los recursos han sido escasos y debieran haberse puesto en disposición de una planificación pública. El hecho de que la mayoría de los pacientes ya ingresase en los centros privados con el test hecho en la red pública nos señala más costes asumidos por el sistema público y no por el privado. Algo similar se entiende que sucede con la atención en Urgencias, la cual ha tenido que ser soportada casi íntegramente por la red pública.
Por todo lo expuesto, reclamamos una auditoría pública a través de la cual la ciudadanía pueda conocer cómo, quién y por cuánto se ha atendido esta pandemia en Navarra. Asimismo, reclamamos que se den las iniciativas sociales, sindicales y políticas que sean necesarias para blindar el sistema sanitario público frente a una red privada que consume recursos de todas y todos para su propio beneficio, impidiendo así que Osasunbidea se fortalezca, algo que, como hemos visto en esta pandemia, resulta de la mayor importancia para la salud de la población.