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La preocupación creciente por “el confuso contexto generado en Navarra durante las últimas semanas” ha levado al sindicato LAB a realizar una declaración leída por el secretario general adjunto de LAB Igor Arroyo y el portavoz del sindicato en Nafarroa Imanol Karrera en la que remarca que es necesario que “los sectores populares recuperemos la energía, ilusión y determinación para abordar el reto que tenemos enfrente: ganar al Régimen tanto en la calle como en las urnas, para avanzar en la soberanía y el cambio social”.

“Desde que se produjo el cambio institucional en Navarra, el sindicato LAB ha manifestado la necesidad de seguir luchando para lograr que el cambio institucional producido hace cuatro años se plasmara en un cambio político y social de calado. Desde nuestra posición de contapoder sindical, hemos mantenido una dialéctica constructiva con el objetivo de avanzar en una doble dirección: mejora de las condiciones de vida y de trabajo de la mayoría trabajadora; y democratización plena de Nafarroa para que la ciudadanía navarra pueda decidir sobre todas las materias que le conciernen”, dicen en la declaración. Entre otras, apuntan “las medidas democratizadoras impulsadas por Gobierno y Parlamento para terminar con el apartheid que durante décadas se impuso a amplios sectores sociales”, la reforma del Servicio Navarro de Empleo “para terminar con el chiringuito de CEN, UGT y CCOO”,  “el esfuerzo realizado en políticas sociales”, la Ley de Contratos Públicos, el Pacto Educativo que revierte los recortes, la eliminación de los y las mileuristas de la Administración.

Desde LAB también destacan que ha habido críticas al Gobierno foral, como “la falta de iniciativa” para una reforma integral de la administración, así como “la insuficiente reforma social o el mantenimiento de una política económica a la medida de la CEN”. La lucha en Huerta de Peralta y la precariedad en el campo navarro son otras cuestiones que desde el sindicato abertzale destacan.

“Si bien aspiramos y luchamos por una transformación más profunda, ponemos igualmente en valor los avances democratizadores y sociales producidos durante los últimos cuatro años. Estos avances han sido posible gracias a largos años de movilización social, que posibilitaron finalmente el desalojo de las fuerzas del Régimen de las principales instituciones navarras”, recuerdan desde LAB. Por ello alertan de que un cambio en la correlación de fuerzas a favor del Régimen en el terreno electoral, o un cambio en las alianzas en favor del PSN, “supondría el bloqueo y reversión del proceso de cambio”.

“En nuestra opinión ha quedado patente que el cambio institucional en Navarra es una condición necesaria, aunque no suficiente, para un cambio político y social integral”, por lo que consideran “imprescindible” que las fuerzas sindicales y sociales se movilicen “no solo interpelando a las instituciones, sino también generando condiciones para alcanzar dicho cambio político y social”. En este sentido opinan que que su tarea es “organizar y movilizar a la gente trabajadora en los centros de trabajo y en la calle en base a una agenda reivindicativa, social, con medidas contra la precariedad, por el reparto del trabajo y la riqueza, por unas pensiones dignas o el fin de la brecha salarial”.

LAB cree que para el desarrollo del cambio político y social hay “dos obstáculos estructurales”, como son “la dependencia de Navarra respecto al Estado español a la hora de diseñar e implementar las políticas públicas y la influencia que sigue teniendo la Patronal navarra, especialmente respecto a la política fiscal y económica de Geroa Bai”.

LAB no deja a un lado otros aspectos negativos como la represión policial contra los trabajadores de Huerta de Peralta o el desalojo del Gaztetxe Maravillas. “Llamamos a preservar el proceso de cambio por encima de las lógicas partidistas y exigimos firmemente al Gobierno de Navarra el abandono de la vía represiva contra el Gaztetxe Maravillas. Respecto a este último asunto, valoramos positivamente la apuesta del Ayuntamiento de Pamplona por el diálogo y su disposición a ofrecer alternativas concretas.”

Para finalizar, LAB se compromete con seguir luchando e interpelando a las instituciones “independientemente de su color, para que implementen una agenda en beneficio de la clase trabajadora”, y quiere dejar claro que no comparte “en absoluto aquellos mensajes que niegan la importancia del cambio institucional, que promulgan la teoría del “todos son iguales” o que relativizan la importancia del pulso electoral en ciernes”, y advierte de que “la más mínima desmovilización electoral de la clase trabajadora beneficiaría principalmente al Régimen, a la Patronal y a las élites económicas de Navarra”.