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El Polígono de Tiro de las Bardenas, activo desde 1951 en tierras navarras, es el único polígono de tiro aéreo del Ejército del Aire español y el más importante de Europa para la OTAN. En plena dictadura franquista se le impuso esta infraestructura militar a la sociedad navarra y a día de hoy continua esa imposición con una fuerte oposición entre los y las vecinas de la zona.

En la actualidad, el polígono de tiro se ubica dentro de un Parque Natural, en medio de una Reserva Mundial de la Biosfera, e impide que Bardenas sea declarado Parque Nacional.

Quienes convocan la marcha del próximo domingo recuerdan que el que el gasto militar en el mundo ha sido en 2018 el más elevado desde el final de la Guerra Fría, y que esta carrera armamentística y política militarista provoca que las guerras siguen extendiéndose por toda la geografía del planeta. A los motivos medioambientales y antimilitaristas, se les suman también los de seguridad para las personas que habitan en el entorno del polígono de tiro, y es que cada vez son más intensos y persistente los bombardeos con fuego real que experimentan en Bardenas.

La Asamblea Antipolígono subraya que “ya que son mayores los peligros que corremos en las Bardenas y su entorno con un escenario de guerra cada vez más encarnizada que impera en el mundo, y en el que inevitablemente nos implican”, hay que rechazar que Nafarroa sirva “para experimentos de guerra” solo traen “dolor, destrucción y sufrimiento para las poblaciones.”

Por ello reclaman una “respuesta social firme y sostenida para lograr el desmantelamiento del Polígono de Tiro” y convocan la XXXII Marcha al Polígono de tiro de las Bardenas, que partirá el domingo a las 12.00 de la mañana desde Los Aguilares hasta llegar a las inmediaciones del Polígono de Tiro. Allí se tendrá un especial recuerdo para Gladys Del Estal en el 40 aniversario de su asesinato.

Diversos colectivos sociales, sindicatos, partidos y agrupaciones municipales han mostrado su apoyo a esta marcha.