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Una moción presentada por la familia de Fernando Sota pedía en el texto que la Audiencia Nacional reconsiderara la suspensión del año de cárcel contra el vecino de Tafalla. Asimismo manifestaban su “sorpresa, preocupación y gran dolor”. Bildu, partido que había incluido la moción, pedía que se debatiera la defensa de un vecino de la localidad al que se le “han aplicado medidas desproporcionadas a los actos que ha realizado”: “Al margen de lo que piensen sobre la legitimidad, creo que todos podemos compartir la desproporción de la pena. Creemos que está realizada por la venganza y odio”, afirmaba el portavoz de Bildu, Arturo Goldaracena.

La moción no ha prosperado ya que se ha establecido un empate técnico entre los votos de Bildu e IT (seis más uno) a favor, los siete en contra de UPN y la abstención de los socialistas. Estos últimos han explicado que se vivía una situación parecida a la de octubre (refiriéndose al caso de Inés del Río). El PSN ha querido reconocer el rechazo de la “condena abusiva” si bien han querido mostrar el absoluto respeto a los jueces: “Aunque no estemos de acuerdo con ellos hay que respetar las leyes”, ha comentado Solchaga quien ha terminado apelando a la convivencia pacífica.

Más comprensiva con la moción se ha mostrado la concejala de IT, Ana Ozcáriz, quien ha calificado la situación de la lucha de David contra Goliath. Así ha enumerado casos de enriquecimiento de políticos y de la iglesia con los que “no pasa nada”. Ante su anuncio de que apoyaría la moción, la concejala de IT ha recibido los aplausos del público (familiares y amigos de Fernando Sota) que se encontraba en el pleno. Finalmente, la alcaldesa ha apelado al respeto al estado de derecho como pilar fundamental de la democracia para terminar incidiendo en que el Ayuntamiento de Tafalla no tiene competencias en dicha materia.

Votado el punto, los familiares y amigos de Sota han abandonado la sala. Minutos más tarde, se ha producido la detención de Francisco Javier Fernández Casco, acusado de resistencia y desobediencia por la Guardia Civil, que lo ha reducido entre seis agentes. Le acusan de haber insultado a los militares y de haberles agredido. La Guardia Civil ha ocupado la localidad y colocado controles en las entradas al municipio.