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Tras las fiestas de San Fermín Txiki, el Ayuntamiento de Iruñea hizo pública y notificó a la Comisión de Fiestas del Casco Viejo la decisión de retirarle la subvención destinada a la organización de las fiestas. La cuantía de la subvención era de 5.791,33€, de los que un 75% ya había sido abonado y la Comisión de Fiestas debía reintegrar. La razón aducida por el Ayuntamiento era la inclusión en el programa de fiestas de “anuncios de carácter político y reivindicativo”, algo que, a su entender, contravenía las bases de la convocatoria de subvenciones de participación ciudadana. La Comisión de Fiestas recurrió la decisión y, un año después, el Tribunal Administrativo de Nafarroa le ha dado la razón y ha establecido que el Ayuntamiento deberá devolverle la subvención retirada.

La convocatoria de subvenciones a la participación ciudadana que anualmente convoca el Ayuntamiento de Iruñea incluye, entre las causas de exclusión, “la realización de actividades que contengan actos de carácter político o reivindicativo”. A ello se remitió el Ayuntamiento para justificar su decisión, alegando ante el TAN que en el programa de fiestas de 2022 se incluían “diversos anuncios de algunos colectivos que recogen alusiones, menciones y/o publicidad de eslóganes y entidades políticas”.

Alegaba así mismo la inclusión de una actividad “con mención expresa en favor de presos pertenecientes a la banda terrorista ETA” -mención inexistente en el programa de fiestas de San Fermín Txiki del año 2022- y se remitía a ella para justificar también la retirada de la ayuda por un supuesto incumplimiento de la Ordenanza General de Subvenciones.

La Comisión de Fiestas de Alde Zaharra, por su parte, explicaba en su recurso que la inclusión en el programa de fiestas de anuncios pagados no equivale a “la realización de actividades que contengan actos de carácter político o reivindicativo”, y que además es práctica habitual y conocida por el Ayuntamiento la inclusión en dicho programa de actividades organizadas por entidades distintas de la Comisión de Fiestas. Es, sin ir más lejos, el caso del propio Ayuntamiento, organizador por ejemplo de las salidas de la comparsa de Gigantes y Cabezudos de la ciudad que, cada año, figuran en el programa de San Fermín Txiki. La Comisión de Fiestas indicaba, además, que en el programa no existía la mención expresa en favor de los presos y presas políticas vascas alegada por el Ayuntamiento.

Exceso de celo del Ayuntamiento

En su resolución, el TAN atribuye al Ayuntamiento un “exceso de celo interpretativo” que “salta a la vista”, y aclara que “evidentemente, no es lo mismo ‘realizar’ o ‘llevar a cabo’ un acto que limitarse a insertar, previo pago, un anuncio informativo sobre su futura realización por otra entidad distinta de la Comisión de Fiestas”.

Además, establece que “el informe municipal pretende que una práctica admisible en medios de comunicación de cualquier signo o tendencia, como es la inserción de publicidad pagada por entidades legales de carácter político o reivindicativo, sea considerada causa de pérdida total de una subvención legalmente otorgada”. Para el TAN, si se pretendiera que “semejantes restricciones” fueran causas válidas de revocación de la subvención, deberían estar previstas en la convocatoria o en la normativa aplicable “de una forma clara e inequívoca, en aras del principio de seguridad jurídica” establecido en la Constitución.

Por todo ello, el TAN anula en su resolución las decisiones del Ayuntamiento de Iruñea sobre la retirada de la subvención “por no ser conformes a Derecho”, y establece que se mantiene el importe de la subvención concedida a la Comisión de Fiestas de Alde Zaharra.

Protesta bailonga contra las prohibiciones

Precisamente, la sentencia ha coincidido con la celebración este fin de semana de las fiestas de San Fermin Txikito. Y la polémica por la obsesión del Ayuntamiento contra las fiestas populares ha vuelto a ser tema de actualidad. En un primer momento, el Ayuntamiento se negó a colocar baños portátiles en las calles de Alde Zaharra. Ante las quejas vecinales y la convocatoria de una protesta, reculó. Pero días después y solamente unas horas antes del inicio de los festejos, la alcaldesa Cristina Ibarrola dió una nueva estocada prohibiendo algunos actos musicales programados en diferentes bares y locales de Alde Zaharra. Ante ello, el sábado se celebró una protesta en la Plaza del Ayuntamiento. En esta ocasión, de forma festiva para denunciar este nuevo ataque contra las fiestas populares.