El despido, el paro y el sucidio

2015-ko martxoak 23

 Laboral Kutxa le dio el último empujón a Miren en sus  decisión de abandonar este mundo. Pero ni podemos ni debemos olvidar que tras esta decisión hubo muchas personas y entidades que le animaron a hacerlo.

Una empresa hace balance en una reunión y decide que sobran 10 personas, pone un ERE encima de la mesa y despide a Miren y 9 compañeros mas con el apoyo del fiel sindicalismo de UGT y Cuadros. Ella lucha hasta el final, exige y al final clama porque le devuelvan un empleo que ahora hacen otras personas por menos salarios y en peores condiciones,  o quizas compañeras suyas que van a meter horas extras los sabados. Maldita la dirección de Faurecia y el sindicalismo que acepto su despido. Culpables de tu muerte todos ellos.

 Después el despido y con el el paro y ese oscuro tunel que se alarga cada vez ante la imposibilidad de volver a encontrar un empleo que te permita sobrevivir. De vivir dignamente nos olvidamos por completo. Sigues en esa oscuridad que se hace mas y mas negra según va terminandose el desempleo y las ayudas sociales no llegan. La administración tarda en dartelas,  tienes derecho a ellas les dices , pero las letras de tu caja siguen pasando puntualmente a tu cuenta de números rojos. Ellos no conocen de personas y vidas, solo de cifras y expedientes, la administración y el banco no saben de niños que no comen, de ropa mil veces usada, de platos semivacios, de noches sin dormir, de cartas certificadas como la de Miren, de depresiones y ansiedades, de suicidios o asesinatos, de personas al fin y al cabo.

 Ella se quito la vida, pero fueron Faurecia y sus sindicatos complices junto con  la caja Laboral las que le pusieron la soga al cuello o de pie en la ventana, los que además le dieron el último empujon con desprecios, oidos sordos y sobres que negaban una ayuda de la que no hablan sus balances y ratios.

A ella le mato una cadena perfectamente engrasada de ganar dinero a costa de todo, le asesino un sistema criminal y corrupto. Un sistema que en esta tierra tiene responsables y complices, es hora de sacarlos de sus poltronas y acabar con su macabro juego. Necesitamos un cambio social y político, un cambio de sistema, una mirada consecuente hacia las personas y sus problemas.

 

Gehiago