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Que las fiestas no son igualitarias si hay agresiones sexistas es un mensaje que año a año viene repitiendo el movimiento feminista, y hoy tocaba valorar los Sanfermines desde esta perspectiva. Las asociaciones agrupadas en torno a la Plataforma contra la violencia machista han querido remarcar que estas agresiones “son un reflejo más” de la sociedad patriarcal.

Durante las fiestas al menos se han denunciado 2 agresiones de alta intensidad y 11 más de baja intensidad. “Estas solo son las que se han comunicado en el Ayuntamiento o en los canales del movimiento feminista, pero sabemos que son muchas más, ya que hay mujeres que por circunstancias personales ni denuncian, ni solicitan asistencia o ayuda. Las agresiones sexistas son actos injustificables, no cabe especular ni cuestionar a la víctima sobre sus comportamientos. Asimismo, el rechazo firme a las agresiones sexistas debe ir acompañado de un apoyo y una protección a las mujeres que han sufrido estas agresiones y a su entorno”, han declarado ante la prensa en una comparecencia realizada esta mañana.

El protocolo contra la violencia machista que en Sanfermines se pone en marcha integra campañas de sensibilización y servicios de asistencia a las víctimas, además de respuesta ciudadana ante las agresiones. “Pero no es suficiente porque siguen agrediéndonos y matándonos. Desde el movimiento feminista, seguiremos demandando más políticas preventivas a las instituciones, porque no vale solo con poner la tirita en la herida, lo que necesitamos es un cambio radical del sistema patriarcal. Y esto solo se dará si contamos con una sociedad comprometida que plante cara al machismo, donde todos los hombres que dicen ser aliados den el paso de renunciar a sus privilegios y acabar con las complicidades, plantando cara a amigos, hermanos y vecinos…que muestran comportamientos machistas. Porque ellos, los hombres, son los que tienen que protagonizar el cambio”.

Ante el aumento del discurso negacionista de la ultraderecha y del fascismo “cada día más presentes”, se han mostrado dispuestas “a plantar cara y combatirlo”, porque no quieren que las agresiones machistas “se normalicen en entornos festivos” y con ello que se condicione “la participación del 50% de la población, las mujeres, negándonos disfrutar del ocio festivo en libertad y sin miedo”.