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En este artículo de opinión los y las concejales de EH Bildu reflexionan sobre la ausencia de compromisos para prevenir y luchar contra la violencia machista en la declaración institucional acordada por los grupos en el Ayuntamiento y subrayan la necesidad de medidas en prevención y co-educación.

Un año más el Ayuntamiento de Pamplona ha aprobado por unanimidad una declaración institucional con motivo del Día Internacional contra la violencia hacia las mujeres.

Desde EH Bildu en numerosas ocasiones hemos mostrado nuestro escepticismo ante este tipo de declaraciones, no porque no creamos que no tengan su importancia, sino por el escaso recorrido que tienen, ya que estas palabras si no van acompañadas de serios compromisos concretos no quedan más que en una mera declaración de buenas intenciones, algo que suele ser bastante habitual en algunas instituciones.

Queremos recordar la declaración del año anterior, aprobado también por unanimidad, en la que se adquiría el compromiso como administración pública de “seguir implantando medidas para su erradicación en todos los ámbitos y para garantizar el acceso de las mujeres que la sufren a una justicia reparadora”. Sin embargo, han sido pocos los compromisos adquiridos intentando continuamente invisibilizar el problema. Claro ejemplo de ello fue la actitud pasiva de UPN resistiéndose en un principio a convocar la junta de portavoces para dar una respuesta contundente y crítica ante la agresión sexista ocurrida en fiestas de la Txantrea.

En 2013 acudieron 263 nuevos casos al Servicio Municipal de Atención a la Mujer, siendo un total de 539 los casos tratados, más de 1880 actuaciones. Teniendo en cuenta también los cientos de casos que son denunciados en otros servicios y todos los que no se denuncian, es evidente que se necesitan más medidas y actuaciones institucionales, con el objetivo de reducir los casos hasta lograr la erradicación de todo tipo de violencias sexistas, ya sean sexuales, físicas o psicológicas.

El trabajo de prevención y co-educación es un trabajo que se debe hacer de forma permanente, ya que es imprescindible y necesario para dicha erradicación, pero a pesar de haberlo exigido en numerosas ocasiones por parte de EH Bildu, sigue siendo inexistente en la política municipal de UPN.

“La violencia tiene mil caras y no todas son moratones” es el mensaje de la campaña de este año, un mensaje que quiere recordar que la violencia sexista se expresa de miles de formas, muchas de ellas sin secuelas físicas pero sí psicológicas y no por ello menos graves.

En la declaración se hace hincapié en esta idea, donde se reconocen todo tipo de violencias, entre otras el “que se decida por nosotras” y también el “que se opine sobre nuestro cuerpo”.

Y es en estos dos casos, donde queremos denunciar la postura contradictoria de UPN y PP, ya que, mientras reconocen en la declaración institucional que violencia también es que opinen sobre nuestro cuerpo, han defendido a la vez el anteproyecto de la ley del aborto impulsado por Gallardón, un anteproyecto cuyo objetivo hubiera supuesto la eliminación de raíz de nuestro derecho a decidir, del de todas las mujeres, y hubiera supuesto una involución en nuestros derechos como mujeres.

Esta contradicción por parte de UPN y PP refleja la poca seriedad y la poca coherencia sobre algunos temas que estos partidos demuestran en este tipo de declaraciones, algo que suele ocurrir habitualmente cuando hay una ausencia de compromisos y solo se basan en declaraciones para un día. Por ello, para evitar estas incoherencias y dotar a las declaraciones de un auténtico valor, creemos que sería conveniente que fueran acompañadas de compromisos institucionales en cada ámbito de competencia, en este caso del Ayuntamiento de Iruñea, que hagan posible dar pasos en pro de lo que defendamos, porque como todos y todas sabemos, las palabras se las lleva el viento.

Ana Barrena, Eva Aranguren, Peio Martínez de Eulate, Patricia Perales y Aritz Romeo, concejales de EH Bildu en el Ayuntamiento de Iruñea