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Las consignas a favor de la Guardia Civil y de España en la manifestación convocada por Vecinos de Paz de Berriozar ante la Comandancia de la Guardia Civil en Iruñea fueron constantes, como también las fueron las referencias a Bildu o al alcalde de la capital navarra Joseba Asirón. Ni siquiera el movimiento feminista se libró de las críticas con gritos como “¿dónde están las feministas?”, ni tampoco la presidenta de Navarra Uxue Barkos. ‘Guardia Civil te queremos aquí’, ‘Libertad’, ‘No nos engañan, Navarra es España’, Bildu fuera’ o ‘Asiron dimisión’, fueron algunas de las proclamas que se escucharon en la movilización.

Alberto Baraibar aguantó el tipo, pero hubo otros que no. Por ejemplo el miembro de Juventudes Socialistas Kevin Lucero, que afirmaba en Twitter “He ido a la concentración por las agresiones de Altsasu. Me he ido en cuanto se ha convertido en un ensalzamiento del sentimiento nacional”. Además de Baraibar, asistieron a la concentración la delegada del Gobierno en la Comunidad foral, Carmen Alba, el presidente de UPN, Javier Esparza, la secretaria general del PSN, María Chivite, o la portavoz parlamentaria del PPN, Ana Beltrán, además de otros cargos regionalistas, socialistas y populares. También estuvieron presentes los expresidentes del Gobierno de Navarra Miguel Sanz y Yolanda Barcina.

El colectivo convocante del acto es Vecinos Por la Paz de Berriozar, un colectivo surgido tras el atentado mortal contra el militar español Francisco Casanova. Se definen así mismos como “personas con diferentes ideas políticas e inquietudes” a quienes les une “el posicionamiento en contra del terrorismo y de toda ideología que lo ensalce, disculpe o justifique” y añaden que defiende “la vida y la libertad, y el apoyo a las víctimas”. A pesar de ser un colectivo local, tomó la iniciativa de convocar un acto en Iruñea por unos hechos ocurridos en Altsasu. Y lo hacía tras unas jornadas durante las cuales no han dejado de difundir mensajes contra el gobierno del cambio y la mismísima Uxue Barkos por su reacción ante los hechos de Altsasu.

Además de las continúas críticas al gobierno foral y sus políticas en cuestiones tan dispares como Educación o cuestiones de memoria histórica, Vecinos por la Paz también ofrece su opinión sobre los acontecimientos que se dan en Catalunya con tintes claramente españolistas.

Sin duda, un colectivo que va mucho más allá de ser “un grupo pacifista” conformado por “personas de diferentes ideologías”, y que ayer logró reunir a cientos de personas pese a ser residual en su propia localidad. El gobierno del cambio ya tenía una experiencia con este colectivo, porque con motivo del homenaje a Francisco Casanova en 2015, la presidenta del Parlamento de Navarra, Ainhoa Aznárez (Podemos), tuvo
que abandonar el acto de homenaje tras recibir “insultos y amenazas” por parte de algunas de las personas asistentes.Ayer, sin embargo, Alberto Baraibar decidió participar en este acto. Como decía Alberto Pradilla en Twitter, “un error porque acto era contra el cambio. De todas se aprende.”