Acusan a Iberdrola de poner en una situación límite a las familias vulnerables con la subida del precio de la luz

Vecinos y vecinas de colectivos de Barañain agrupados en Herrigunea colocaron carteles en la oficina que Iberdrola tiene en la localidad para denunciar la subida de la tarifa de luz y los ingentes beneficios de las empresas energéticas frente a la situación precaria de muchas familias, solicitando que el sistema energético debería de ser público.

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Durante los últimos meses hemos visto como se ha disparado el precio de la luz, como poco a poco el precio de nuestras facturas se ha ido incrementando, llegando este pasado miércoles al máximo histórico que no se había superado en 20 años. Aun a día de hoy se mantiene por encima de los 100€ el megawatio. Este incremento de precio se carga contra las familias más vulnerables que ya sufren una situación límite desde el inicio de la crisis sanitaria el año pasado.

En Barañain son ya 1000 personas las atendidas en Centro Solidario de Reparto de Alimentos Saskia gestionado por la Plataforma Social, y durante este curso, medio centenar de niños y niñas han asistido al programa Karibu impulsado por el Herrigune y Children of Africa de apoyo escolar para familias en situación de vulnerabilidad. Desde sindicatos se manejan datos de que un 40% de las pensiones están por debajo de los 800€.

A estas personas en situación de vulnerabilidad hay que añadirles el riesgo de pobreza energética, poniendo en riesgo su salud, más aun cuando el precio de la luz no para de subir durante los últimos meses, un 44% en desde Julio de 2020.

Mientras, empresas como Iberdrola o Endesa ganaron 5.000 millones euros en 2020 y en los primeros 6 meses del año suman más de 2000 millones de euros de beneficios. El problema es de raíz, el problema es la privatización de un sistema eléctrico que debería ser publico, un sistema que mire por las personas y el medio ambiente y no en el beneficio de grandes empresas.

Ayer jueves a las 19 de la tarde varios colectivos que formamos parte de Herrigunea nos juntamos delante de una oficina de Iberdrola en Barañain, a denunciar estos hechos que encrudecen una situación ya de por si muy dura y que van a hacer más difícil a varias personas de Barañain llegar a fin de mes. Si algo ha quedado claro durante la pandemia es que no podemos dejar en manos de empresas privadas la gestión de necesidades y servicios públicos, menos aún en cuestiones básicas como la energía o la salud.

Gehiago