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Estoy muy satisfecha con el centro en el que mi hija ha iniciado su escolarización, el Ikastetxe Sanduzelai, una escuela cercana con buenos profesionales. No obstante el próximo curso promete ser bastante más complicado, ya que en lugar de mantener los dos grupos que existen actualmente para ese curso, nos anuncian que sólo se formará un grupo. Todo ello a pesar de la matriculación de un nuevo alumno, lo que supone hacinar a 27 niños y niñas en 50 metros cuadrados. Mientras, la clase de al lado permanecerá cerrada y una profesora tendrá que ser reubicada lo que repercutirá negativamente en el funcionamiento del centro.

    Siempre al borde de la Ley, desde el Departamento de Educación tratan de escatimar recursos sin pensar en la calidad del servicio que como ente público deben ofrecer. Así, recortan sobre recortado e incumplen la palabra dada ya que el Consejero anunció públicamente en su día que los recortes en Navarra no serían tan agresivos como en el Estado y que el ratio para segundo de infantil pasaría de 25 a 26, no a 27.

    De esta manera nos quejamos, y no nos escuchan, no accediendo a reunirse con los padres y madres para exponerles la condiciones poco aceptables en las que se van a encontrar nuestros hijos e hijas desde cualquier punto de vista (pedagógico, físico, etc). De esta manera nos preguntamos, dónde queda la libertad de elección de centro, el velar por una educación pública de calidad, la protección del menor… Entendemos que si en lugar de proteger a quienes libremente optan por un determinado modelo y un determinado centro, sólo se ponen trabas, el efecto disuasorio es claro para futuras matriculaciones. Nos resistimos a pensar que este efecto es algo buscado, pero no entendemos que se quieran dejar cerradas aulas cuando pueden y deben estar abiertas.

    Rechazamos esta situación absurda en la que habiendo medios y compromisos políticos a favor de la continuidad de dos aulas, se buscan argucias y nuevos argumentos, y se echan balones fuera tratando de culpabilizar al centro, para llevarnos a una realidad en la que van a resultar perjudicados 27 niños y niñas de 4 años.
    
    No obstante, a pesar de las trabas seguiremos apostando y peleando por una Educación Pública de Calidad para nuestros hijos e hijas.