Ratificadas las penas de cárcel contra los “tartalaris”, Mugitu confirma “el fracaso de Barcina”
El Tribunal Supremo ha confirmado la condena de dos años de cárcel impuesta en noviembre del pasado año a los activistas de Mugitu Gorka Ovejero, Julio Martín Villanueva e Ibon García Garrido por los tres tartazos lanzados a la presidenta del Gobierno navarro, Yolanda Barcina, en octubre de 2011.
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En una sentencia notificada este jueves, el alto tribunal destaca que «no se vulneró su derecho a la presunción de inocencia ya que hubo prueba de cargo legítimamente obtenida que acreditó perfectamente la participación de los acusados, que fue colgado en el blog del movimiento Mugitu».
Se confirma asimismo la condena al cuarto acusado, Mikel Álvarez Forcada, a un año de cárcel por considerar que «aunque no participó en el lanzamiento, si bien levantó los brazos en inequívoca señal de apoyo». Los cuatro tendrán además que abonar una multa de 900 euros cada uno.
El Supremo rechaza también el argumento de las defensas, que señalaban que se había vulnerado el principio ‘non bis in idem’ o cosa juzgada porque los hechos habían sido investigados en el Estado francés y archivados por la Fiscalía de aquel país.
«No se siguieron en Francia actuaciones en contra de los ciudadanos españoles, autores materiales de la agresión, por seguirse en España causa contra ellos por los mismos hechos», ratifica el alto tribunal.
Mugitu reivindica "el fracaso de Barcina"
Mugitu ha querido denunciar la desproporción de la condena, subrayando que es la pena de cárcel más alta jamás dada contra la utilización del entartamiento político en todo el mundo. Sin embargo, consideran que Barcina ha fracasado. "La Lehendakari de la Comunidad Foral de Navarra, Yolanda Barcina Angulo, buscó obsesivamente el encarcelamiento de los opositores al TAV, pidiendo el máximo de penas de cárcel que podía pedir (9 años para Gorka y a cada 6 para Julio, Ibon y Mikel). El haber evitado la cárcel y poder seguir en la lucha contra el TAV son un claro ejemplo del fracaso de la señora Barcina", consideran.
Por otro lado, afirman que el mantenimiento de las condenas ratifica "el carácter político de éstas". "Existe un ánimo de condenar a los tartalaris, pero al mismo tiempo, se quiere evitar que entren en la cárcel, ya que sería un auténtico escándalo encarcelar a alguien por unos entartamientos", dicen desde Mugitu.
Los opositores al TAV se reafirman en su compromiso para continuar en la lucha contra el TAV. "No podemos olvidar que todo esto, ocurre dentro de la lucha en contra del TAV. Por ello, los tartalaris reivindican su firme compromiso para seguir en la lucha en contra del TAV", y llaman a la sociedad vasca a seguir en la lucha contra esta infraestructura "destructora, despilfarradora y corrupta".