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Pablo Salinas, joven de 32 años, murió atropellado el jueves, 27 de mayo, en el paso peatonal semaforizado que hay en el cruce de Martín Azpilcueta con la Avenida Bayona. Thomas Hiribara, joven de 31 años, murió atropellado el sábado, 29 de mayo, en el puerto de Otsondo.

En ningún caso llevar casco les habría servido de algo. En ningún caso las condenas de cárcel servirán para nada.

En estos mismos días, el Ayuntamiento de Pamplona ha hecho público su plan para el eje ciclista de la Txantrea en el tramo de la Cuesta de Labrit. La Plataforma 8/80 y la Asociación Vecinal de la Txantrea participó en el proceso participativo previo que trabajó a partir de dos premisas:

(1) Que el carril bici se situaría a la derecha, en sentido subida, para conectarse directamente al centro y a las conexiones futuras de Cortes de Navarra, Amaya o Duque de Ahumada, evitándose la invasión del carril bici en caso de accidente del coche que circula cuesta abajo.

(2) Que se evitarían los cruces innecesarios en el carril bici, puesto que penalizan la movilidad de la bicicleta, al igual que los recorridos que no priorizan los trazados rectos.

La reciente propuesta del Ayuntamiento de Pamplona es urbanísticamente mala, y muy pobre desde el punto de vista de la movilidad sostenible. Pero, sobre todo, es peligrosa para las bicicletas, porque tiene una anchura insuficiente, porque cambia de lado a la altura del Frontón Labrit y porque, al ser bidireccional, se cruzarán las bicis que suban a 5 km/h con las que bajen a 30 km/h. Además, el espacio peatonal de la derecha seguirá infrautilizado, porque esa acera pegada al muro apenas se utiliza, dado que la mayoría de los peatones van por la izquierda.

Como broma no tiene ninguna gracia. Tras cinco años de trabajo, en los que la Plataforma 8-80 y la Asociación Vecinal de la Txantrea, y otras plataformas de ciclistas, han participado en cuatro reuniones con el Ayuntamiento, todo el trabajo hecho y acordado, no ha servido para nada.

No nos gusta el carril bici de Labrit porque está mal diseñado, y porque no pone la seguridad ciclista en el centro. El diseño vial de los carriles bici de nuestras ciudades es muy importante. Y no sólo para la bicicleta. Es urgente apostar por una movilidad en la que se priorice de una vez por todas a personas, peatones y ciclistas, además de otras modalidades de transporte colectivas, ecológicas y menos peligrosas. Al mismo tiempo, tenemos que ponérselo un poquito más complicado a los vehículos motorizados. Es la única manera de conseguir ciudades más seguras y amables, y de evitar tragedias como las de la semana pasada. No nos cansaremos de repetirlo.

Por eso queremos otro carril bici, y que las muertes de Pablo y Thomas no caigan en el olvido.