El Foro Sozial constata que “el transalántico de la política penitenciaria ha empezado a virar de forma definitiva”
Agus Hernan, representante del Foro Sozial, se ha reunido este fin de semana con los portavoces del EPPK en la prisión de Logroño para hacer un balance de la primera fase del cambio de política penitenciaria en el Estado español. Este análisis se recoge en un documento que constata que el cambio de la política penitenciaria "es definitivo" y que se ha realizado a pesar de la pandemia y de la oposición de algunos partidos políticos y la AVT.
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Este fin de semana se ha desarrollado en la cárcel de Logroño una nueva reunión entre Agus Hernan, en representación del Foro Social Permanente, y una delegación de la interlocución del colectivo de personas presas EPPK, compuesta por Ainhoa Mujika Goñi y Juan Antonio Olarra Guridi.
La última reunión de estas características se desarrolló el 30 de octubre 2020 en la cárcel de Albolote (Granada). Desde entonces Ainhoa Mujika Goñi y Juan Antonio Olarra Guridi han sido acercados a esta cárcel periférica de Euskal Herria y han progresado a segundo grado penitenciario.
En esta ocasión la reunión ha estado centrada en realizar un balance de la primera fase del cambio de política penitenciaria a la que el Foro Social Permanente ha aportado un documento en el que se analiza este periodo.
En el documento, el Foro Sozial cree que es probable que durante este verano la práctica totalidad de los y las presas políticas vascas estén en cárceles periféricas de Euskal Herria, la inmensa mayoría en segundo grado y que la transferencia de prisiones esté en curso.
Tal y como recuerda el Foro, estos avances se han dado “en un contexto difícil” marcado por la pandemia Covid19 y una oposición desde determinados sectores políticos, judiciales, medios de comunicación y una asociación de víctimas de ETA “que tienen una agenda contraria a la resolución, frente a la agenda mayoritaria que apuesta por la construcción de la convivencia democrática”.
Sin embargo, constan que pese a ello “el Gobierno español ha procedido a un cambio de la política penitenciaria” y que “se ha conseguido empezar a virar de manera definitiva el transatlántico de la política penitenciaria” que durante 32 años ha imperado en el Estado español.
Reconocimiento del daño causado y empatía con las víctimas
Por otra parte, en lo que se refiere a la actitud del Colectivo de Presos y Presas Políticas Vascas, la inmensa mayoría de sus 184 miembros actualmente encarcelados en el Estado español han aportado motu proprio escritos desde su trayectoria vital y su vivencia personal en los que hacen un reconocimiento expreso del daño causado, un reconocimiento del dolor de las víctimas y muestran su empatía hacia su sufrimiento.
“Hoy, constatamos que las familias y allegadas de las personas presas viven esta nueva situación con satisfacción y alivio, además de esperanzadas en que la misma permita abrir definitivamente la ventana a la resolución completa de esta cuestión”, dicen desde el Foro Sozial, que subrayan que estos cambios en la política penitenciaria han sido posibles, fundamentalmente “por la voluntad política de las partes implicadas, pero han venido impulsados y acompañados por el consenso construido durante años en el plano institucional, político, sindical y social”.